Cami abrió la puerta de la casa alrededor de las 6 de tarde, mucho más temprano que de costumbre, se quito los odiosos tacones y se extraño al ver la casa completamente a oscuras.
-Qué raro, donde estará Cande- dijo muy bajito- ¡Cande, Alexxx!!!!!!!!- llamo entrando en el salón.
Allí no había nadie, poniéndose histérica, se acerco hasta la mesita donde siempre que Cande se llevaba a los niños a casa de Lu le dejaba una nota, se acerco rápidamente al teléfono y marco el teléfono de su hermana.
Nada más descolgar el teléfono su hermana la saludo por la Navidad, pero Cami le corto rápidamente.
-¿¿Lu están allí los niños???- dijo impaciente
-Como que no están- dijo con los nervios alterados- ¿Cande esta allí?
- ¡Que Cande ha comido en casa!!!!, y donde ha llevado a los niños- espero a que su hermana le contestara- Si eso voy a hacer, llamarla,- Si no te preocupes cuando sepa algo te aviso, chao.
Cami empezó a marcar el teléfono de su sobrina mientras la peor de sus sospechas se estaba haciendo realidad.
-El teléfono al que llama está apagado o fuera de cobertura- mierda
Tirando el teléfono al sofá y rompiendo a llorar, totalmente fuera de sí.
-¡Dios mío mis niños, por favor que no les haya pasado nada, es que no tuviste bastante el año pasado…
Susurrando cosas sin sentido, cayendo en el suelo, gateo hacia el teléfono, y empezó a marcar el número de la policía para avisar de la desaparición de los niños a manos de Benjamín, cuando la puerta de su casa se abrió y los niños entraron riendo a carcajadas, Alex entro corriendo al salón y se lanzo sobre su madre, que se secó rápidamente las lagrimas y que lo abrazo con fuerza.
- Mami, mami hemos estado con Benja en el parque y hemos jugado un montón, y nos ha comprado un algodón de azucar y Angie se ha puesto puesto toda pegajosa- dijo el niño mirando a su hermana que estaba en brazos de benja, sonriendo y dando golpes a su mejilla- Jajaja que bien la hemos pasado mami- seguía relatando Alex sin parar, mientras Cami le daba besos por todas partes sin creerse aún que los niños estuvieran bien, mientras miraba furiosa a Benja.
Se acerco a Benja y le tendió los brazos para que le diera a la niña, en cuanto estuvo entre sus manos, respiro su dulce aroma, intento tranquilizarse, le dio un beso en sus rizos, y se agacho hasta la altura de Álex.
-Cariño pueden ir a jugar a la cocina tu hermana y tú, que tengo que hablar a solas con benja.
Alex asintió agarró a la beba de la manita y se marcharon dejándolos solos.
Benja tembló con la mirada de Cami, en el poco tiempo que llevaba allí nunca la había visto tan furiosa, pero cuando la vio venir hacia él de ninguna manera se hubiera esperado esa reacción.
Pero cuando sintió como le cruzaba la cara de un cachetazo, algo dentro de él le hizo saltar, ya que cuando le iba golpear otra vez, tomó la mano de ella al vuelo, y se la puso contra su espalda, juntándola totalmente a su cuerpo, dejándola totalmente indefensa ante de él, ambos tenían ahora la respiración agitada.
-Desgraciado- dijo ella temblando de rabia- Como te vuelvas a acercar a mis hijos…
-¿Qué? que me vas a hacer- apretándola más fuerte contra su cuerpo mientras sus alientos se entremezclaban ya que estaban totalmente pegados, y sus rostros a unos escasos centímetros de distancia.
Cami intento empujarlo pero era como mover una roca, imposible.
Llamaron a la puerta, pero ellos estaban tan concentrados en matarse con la mirada que no lo oyeron, siguieron insistiendo en la puerta, mientras Cami intento golpearlo con la pierna en su entrepierna, pero Benja fue más rápido, con las dos manos contra su espalda y llevándola contra la pared la inmovilizo totalmente.
-Hijo de …- no pudo termino la frase ya que la boca de Benja había cubierto la suya, al principio se quedo estática, pero segundos le siguió con ansias el beso, haciendo que un momento se convirtiera en un beso explosivo.
Un carraspeo a sus espaldas, hizo que se separaran rápidamente.
-¿Mamá?- Cami grito, no creyéndose que sus padres estuvieran allí. ¿Papá, que hacen aquí?- dijo poniéndose roja, ya que sus padres habían llegado en un muy mal momento.
-Como que hacemos aquí, hemos venido para Nochebuena- dijo su madre acercándose a ella y abrazándola dulcemente como solo una madre puede hacer- Mi pequeña
-¡No has avisado, además hoy no es Nochebuena!
-Cariño, claro que es Nochebuena y te hemos llamado como 15 veces al celular y no contestabas, así que aqui estamos!!
Chachan- dijo de broma-No me hace gracia, y ya les dije que este año no quería celebrar nada, papá te lo dije o no.
-Como si pudiera alguna vez calmar a tu madre cuando se le mete algo en la cabeza- dijo abrazando a Cami.
-Y además como demonios han entrado.
-Pues Alex nos ha abierto- dijo su madre dándole besos por toda su cara a su nieto- Ya que tú estabas muy pero que muy ocupada.
-¡Mamá!!!- la regaño Camila roja como un tomate
-Y bueno cariño no nos vas a presentar a tu novio
-No es mi no…- pero rápidamente pensó en todo lo que dirían si realmente supieran que se había llevado un preso a su casa, así que pensándolo mejor que pensaran que Benja era su novio no sería tan malo- Mamá aún no te lo quería decir, pero este es Benja mi novio.
Continuará.....