Finding A Way Home

3. Inicio de clases

Después de pasar Navidad y Año Nuevo juntos, Peter y Harley realmente se habían unido. Se habían dado cuántas que organizándose bien y compartiendo un poco los gastos, sus vidas se volvían más sencillas.

Sin embargo, la parte más tranquila de su nueva vida adulta estaba por terminar ya que sus agendas estaban apunto de volverse más ocupadas con el inicio de las clases.

Esos nervios se habían reducido ya que Harley también asistiría al MIT, en otra especialidad, pero por lo menos los dos jóvenes tenían la posibilidad de encontrarse en el campus y pasar el sus descansos juntos.

Peter había aprovechado el consejo de Harley y trabajo durante los días festivos para ahorrar la mayor cantidad de dinero posible y no verse en tantos aprietos cuando no pudiera trabajar tanto por hacer tareas y proyectos.

Harley estaba por las mismas, pues a diferencia del castaño no encontraba algún trabajo fijo. Solo en los últimos meses había pasado de ser mesero, mecánico y bibliotecario, aunque lo más estable que había tenido era tutor en una escuela cercana.

Esa mañana los dos se estaban volviendo locos, era su primer día y no podían darse el lujo de llegar tarde.

— ¡Deprisa Peter!— gritó Harley desde las escaleras.

— Ya voy— respondió Peter mientras cerraba su puerta y terminaba de arreglarse.

La noche anterior Peter había estado patrullando y apenas había llegado a dormir. Por lo que está mañana su alarma no había logrado despertarlo y Harley básicamente tuvo que sacarlo de la cama a rastras.

Juntos tomaron el metro, Harley no dejaba de mover su pierna y revisar su reloj. Estudiar en el MIT era su sueño y la ansiedad lo están comiendo vivo, Peter también estaba emocionado pero con lo que pasó en los últimos meses sentía que tenía los pies en la tierra y no se dejaba llevar por sus sueños y esperanzas, estaba siendo más realista.

— Te veo en el departamento— se despidió de prisa Harley para ir a buscar a sus compañeros.

— Si, buena suerte.

Peter suspiró y tomo su propio camino.

Si su primera semana había sido complicada, Peter no tenía idea de cómo se las arreglaría para sobrevivir el resto del semestre. Ningún maestro había tenido piedad y tan pronto llegaron comenzaron a dejar lectura, trabajos y algunos proyectos.

Tampoco ayudo el hecho de encontrarse con nombres conocidos en sus libros y clases. Doctor Connors y Doctor Octavious. Eso debía ser una broma, ahora también tenía que mantenerlos vigilados.

Nueva York no era de tanta ayuda de igual manera, el crimen en las calles parecía aumentar y Spiderman no podía darse el tiempo suficiente para asegurarse que todos estuvieran seguros.

Un aspecto positivo de la universidad, era que no tenía clase de deportes y no tenía la necesidad de ocultar sus heridas de las noches de patrulla.

Para cuando se dió cuenta, Peter ya tenía un enorme cantidad de trabajos pendientes y a varios maestros enojados por no llegar a sus clases a tiempo.

— ¿Te encuentras bien?— preguntó Harley en el umbral de la puerta. Él acababa de llegar de su trabajo, el rubio tenía las llaves de su puerta por una emergencia aunque realmente solo la usaba para ir a ver cómo se encontraba Peter.

— Si, solo que me estoy ahogando en trabajo— respondió el castaño.

— Que tiene tan ocupado, creí que el genio Peter Parker era más organizado— respondió Harley en tono burlón mientras tomaba asiento en su cama.