PROLOGO
de lo malo lo peor
En algún pequeño pueblo de Inglaterra, 1740- 1761
El patriarca de la familia Pussett siempre presumía de su familia. Desde su preciosa mujer de cabellos rojizos, hasta su primogénita, Gianna, que era igual a esta y de su mayor orgullo, el único varón de la familia, Andrey, que al igual que su hermana tiene el cabello rojizo.
A pesar de que su pequeña casa estaba en medio del bosque y lejos de los demás, a los integrantes de la familia no les molestaba caminar hacia la calle principal o al mercadillo, amaban sentir el aire puro que se sentía en el bosque.
Pero toda la imagen de la familia feliz fue interrumpida por la abrupta muerte de la matriarca de la familia, quien en camino a la casa se cruzó con un oso que no dudo en atacarla llevándose su vida. Los habitantes del pueblo le dieron su pésame a la familia y entre todos armaron un lindo funeral.
Sin embargo, las cosas malas no se detenían. Desde la muerte de su esposa, el patriarca les prohibió a sus hijos salir de la casa. Al principio ellos acataron esa orden, por supuesto que obedecieron si cuando perdieron a su madre tenían entre diez y cinco años.
A medida que pasaron los años ambos adolescentes se cansaron de estar en la casa, los mismos libros que habían leído y que releían cuando estaban aburridos, los juegos que ya no les divertían. Convirtiéndose en una rutina observar desde la ventana el paisaje con la esperanza de salir.
Con tan solo dieciocho años, Gianna decidió tomar la decisión de hablar con su padre respecto a salir de la casa, con la promesa de nunca entrar al bosque o ir hacia el pueblo, que ya no recordaba mucho.
El hombre se negó a la petición, y al ver que esta no dejaba de insistir le dio una cachetada, alertando al menor quien estaba escuchan la conversación desde el otro lado de la puerta. Quiso ir hacia su hermana y ayudarla, pero le había prometido que no se iba a interponer a pedido de ella, y él jamás rompía una promesa.
─ Perdón, hija─ se disculpó el hombre al ver el rostro de su hija, que tenía las mismas facciones que su difunda esposa─ No fue mi intención, pero no van a salir.
Gianna asintió mirando el suelo con los labios apretados. Nunca pensó que su padre, la persona que más amaba aparte de su hermano, le levantara la mano. Limpiando con el dorso de su vestido la lagrima que estaba cayendo, respiro varias veces tratando de que sus ojos dejaran de estar cristalizados.
Dándose la vuelta, vio a su hermano menor parado en el marco de la puerta de la habitación que ambos compartían. Le dio una pequeña sonrisa tratando de que olvidada lo que había escuchado. Ella conocía a Andrey como la palma de su mano, básicamente ella lo crio y le enseño todo lo que sabia.
ESTÁS LEYENDO
MONSTER; jasper hale
Fanfiction| Las desapariciones que había en Seattle preocuparon a los Cullen. Más aun cuando alguien había entrado a la habitación de Bella, sabían que se avecinaba una guerra, por lo que tenían que estar preparados. Por lo que Carlisle, ll...