Izuku: Mis Diavólicas raíces

Capítulo 68: ¿Futuro sucesor?

Aviso: Si van a leer lo que puse aquí, quiero que sepan que la razón es porque ya hemos entramos en la trama final, de hecho, solo faltan 11 capítulos a partir de aquí...bueno, sin más que decir, con el capítulo...

Ahora podemos ver como el peliverde y su equipo estaba caminando por el bosque, luego de haber dejado solos a los mafiosos allá atrás con sus compañeros con los que vinieron. Todos estaban serios, salvo por el joven de pecas en el rostro, quien estaba bastante complacido por lo que había pasado allá atrás, el escuchar su nombre, lo hizo sentir como un rey

"Fue un momento productivo, ¿No lo creen?", preguntó Izuku volteando a ver a sus amigos con una sonrisa cálida en el rostro, una que normalmente daría un padre amoroso. Eso solo hizo que sus compañeros le devolvieran la sonrisa para volver a avanzar de una manera rápida, ya que el chico se veía con ganas de asistir a otro lugar...

"Oye, oye, oye...¿Y esa emoción?, ¿Qué te traes entre manos?", preguntó Bakugo con una sonrisa un poco burlona al ver a su jefe así, por lo que lo hizo voltear. El chico seguía con esa mirada que parecía haber sido embriagado de poder, por haberse impuesto antes esos sujetos, de todos modos, eso no fue impedimento para hablar...

"Pues, quiero ver a los sujetos que Redbone ha capturado hoy, los que estaban en aquel sótano del restaurante", dijo Izuku, lo cual hizo que el stand sirviente reaccionara antes y se pusiera de pie al frente de su jefe, quien solo lo miró con un poco de rareza

"Los tendré preparados para usted, jefe...", dijo el sirviente del muchacho mientras que hacía una pequeña reverencia y luego partía corriendo. Salió a una gran velocidad, dejando muy atrás al equipo quien se sentía bastante agradecidos de tener a un sirviente como este...al parecer, aún había trabajo por hacer...

Sí, para todos no se les hacía problema el quedarse a trabajar un poco más, pero para una persona no era la misma sensación. Fuyumi tras haber visto la pequeña escena que dejó Izuku con los mafiosos, no pudo evitar tener nauseas por lo que caminaba un poco lento mientras que se tomaba del vientre...

Momo fue la primera en notar eso en su amiga, por lo que se acercó para apoyarla, no quería que esté así, menos la peliblanca porque no quería resultar un estorbo. La pelinegra llamó a Ibara quien al ser explicada toda la situación, crearía hojas de la planta de menta, para poder hacer sentir un poco mejor a la mayor del grupo, cosa que funcionó...

"¿Q-Qué te sucede?, ¿Qué comiste para que te cayera de esa manera?", preguntó Ibara bastante ingenua frente a lo que le sucedía a su compañera. La azabache daría una seña a la peliverde para que se acercara a donde estaba su oído para susurrarle unas cosas, pero a medida de que iba haciéndolo, los ojos de la religiosa se abrían de par en par...

"¡¿Q-QUÉÉÉÉÉ?!", gritó la peliverde solo para ser tapada de la boca por Momo y Fuyumi quienes tenían una mirada bastante preocupada con ella. Todos se voltearían al momento de escuchar ese grito, notando la pequeña escena que se había formado con la 3 chicas, haciendo que los muchachos, la villana, la niña y el perro se sintieran extrañados

"So-Solo sigan avanzando, no nos hagan caso...", dijo Yaoyorozu mientras que con la mano les hacía una seña para que sigan caminando, por lo que todos se harían lo que ella les dijo, pero Himiko se terminó por acercar a donde estaban las 3

"¿Me pueden decir que pasa?", preguntó la asesina con emoción mientras que daba una amplia sonrisa a las 3 quienes se vieron entre sí. La verdad, conocían a la pelirrubia, no creían que sería bueno contarle, era una boca suelta y conociendo a Fuyumi, estaban seguras de que ella quería que todo se mantuviera en secreto...