Perséfone quería su vida de regreso, queria ser normal, pero eso no se puede cuando la muerte te persigue. Llega a Forks, se siente perseguida y asechada
¿Que sucede con ella?
Jasper Hale y Perséfone Jensen, dos almas gemelas sin saberlo, los vampi...
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Suspiré y terminé de guardar la última caja en la cajuela del auto, mi hermano y yo íbamos a vivir con nuestro padre por una temporada, según mamá era mejor así.
-Es un pueblo pequeño y frío pero van a estar bien allá, estarán con su padre y estudiarán en el instituto, es un buen lugar.-Escuché decir a mamá, ella le estaba explicando a Peter lo lindo que era ese pueblo ya que ella se crió ahí y bueno, para ella todo es hermoso.
-Papá no sabe cocinar.-Murmuró Peter entre dientes, mamá sonrió y lo abrazó.-¿Por qué no vienes tu también? Tu conoces el lugar y papá es malo con las direcciones, seguramente nos perderemos en la carretera.
-Justamente porque conozco el lugar y su gente es que no puedo ir, pero les prometo que iré luego a visitarlos.-Dijo mamá mientras nos abrazaba, Peter suspiró y se subió al auto, a nadie le agradaba la idea de dejar la ciudad.
-Todo va a estar bien Percy, debes ir a Forks.-Asentí confundida por su insistencia, mamá a veces era demasiado extraña.-Toma esto.-Puso en mi mano una especie de collar, parecía antiguo, tenía una pequeña piedra roja en el centro y podía ver mi reflejo en ella.-Úsalo siempre, es un collar que ha estado en mi familia por siglos.-Asentí y me lo puse, el frío de la piedra golpeó contra mi pecho dándome un escalofrío, suspiré y le di un abrazo antes de subir al auto junto a Peter, vimos a papá salir de la casa y abrazó a mamá, ella nos miró y luego le habló a papá, lo vimos asentir y se despidieron, lo bueno es que no eran esa clase de divorciados que pelean, ellos habían decidido quedar como amigos por el bien de sus hijos, éramos una familia unida-divida.
-Bien, va a ser un largo viaje ¿Están listos?-El nos miró por el retrovisor con una sonrisa y rodé los ojos.
-Si capitán estamos listos.-Dijimos Peter y yo al mismo tiempo, era algo que papá siempre hacía cuando íbamos de viaje, Bob Esponja era nuestro programa favorito.
-No los escucho.
-Si lo hiciste.-Dijimos mi hermano y yo al unísono, papá murmuró algo y encendió el auto, sin duda iba a ser un viaje largo.
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Ya estábamos en Forks, no había dormido en todo el viaje ya que Peter no se callaba y, a decir verdad, no quería dormir, era intrigante conocer el lugar donde mi madre había crecido, incluso íbamos a hospedarnos en su antigua casa que ya hacia un tiempo estaba abandonada, eso significaba limpiar, odio limpiar.
