capitulo 10

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Juli.

Cami se iba para Canadá y aparentemente ella tampoco sabía pues su cara lo decía todo.

- Alberto no puede estar haciendo esto. - Dijo makis a mi lado. - ¿Tú sabías? - Volteo a mirarme.

- Por Dios María Cristina no le agrado a mi suegro.

- ¿Que vamos a hacer?

- Por lo que me cuenta Cami, contradecirlo y quitarle esa absurda idea no podemos.

- Es más que claro.

- Amor. - Lanzo Nata atrás de ella.

- No te quiero perder. - Makis de inmediato la abrazo apenas volteo a verla.

Quisiera estar así con Cami pero definitivamente nuestra historia es demasiado diferente.

En ese momento sentí que me vibró el celular.

Princesa ❤️

¿Crees que puedes salir ya?

Quiero hablar contigo.

La verdad no lo sé.

Por favor. No me puedo aguantar hasta las tres de la mañana.

Pero entiende que yo tengo un horario.

Aunque sea cinco minutos.

Voy a preguntar.

Apague mi celular y me encamine hasta donde estaba el jefe.

- Jefe. - Comenté.

- Dime.

- Cree que me pueda dar cinco minutos, es que necesito arreglar algo urgente.

- Juliana, ¿Son las tres de la mañana?

- No.

- ¿Entonces? ¿No ves como esta esto de lleno?

- Pero por favor, son solo cinco minutos.

- No.

- Está bien.

- Deja de pedir permiso y mejor ponte a atender que ya se acabó el momento de charla.

Asentí y me aleje de él. Con la mirada busque a Cami y cuando la encontré negué, ella solo quitó su mirada y se fue.

3:00 am.

Estaba terminando mi turno y a la vez estaba agradecida pues el señor Alberto nunca se dió cuenta de mi presencia.

Ahora estoy con mi ropa normal buscando a Cami afuera de la casa porque después de lo sucedido jamás la volví a ver adentro de la casa.

- Hasta que sales. - Lanzo Sebas atrás mío. - Ven.

El comenzó a caminar por donde estaban los carros hasta que llegó a uno donde estaba Cami arrecostada junto a Ana.

- Nosotros las dejamos para que hablen.- Comento Ana.

Vi que Cami estaba triste se le notaba a kilómetros.

- Amor yo. - Me abrazo fuertemente. - No te quiero perder.

- Yo tampoco. - Le correspondí el abrazo. - ¿Y que vamos a hacer?

- No sé, simplemente quiero quedarme aquí contigo. - Se separó del abrazo. - No me gustaría que nuestra relación sea a distancia.

- A mi tampoco me gustaría, ¿Pero que más se le puede hacer?

Me enamore de la mesera. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora