capitulo 5

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Meses después.

Camí.

Está era mi décima cita con Juli a lo que equivale que es novena cita que le canceló a Cristina sin que mi papá se de cuenta y siempre le digo que tengo cosas que hacer.

Ahora estoy llegando a una heladería que es donde va a hacer nuestra próxima cita.

— Hola. — La saludé con un beso en la mejilla y sentandome al frente de ella.

En las diez citas que hemos tenido ella siempre llega primero y no sé cómo lo hace.

— Hola Camí, ¿Cómo estás?

— Muy bien ¿Y tú?

— Igualmente. Aún me parece ilógico que en la diez citas que llevamos tú siempre llegues primero.

— ¿Te paso mi tip?

— Por favor. — Reímos.

— Pide lo que quieras que está vez pago yo.

— ¿La última vez no pagaste tú?

— Pago yo.

Hicimos nuestra orden que a los minutos llegó y vi que mi helado venía en una copa que estaba en un plato y al lado tenía chocolate con la frase “¿Quieres ser mi novia?"

— ¿Que? — Eso fue lo único que dije.

— ¿Entonces? ¿Si o no?

— Claro que sí.

Nos levantamos de las sillas para abrazarnos y darnos nuestro primer beso.

— Ay te deje manchada de labial. — Expuse. Posicione mi dedo pulgar en sus labios y quite la mancha de labial.

— ¿Me tengo que acostumbrar a esto?

— Un poco. — Reí levemente.

Nos sentamos y luego comenzamos a comer y cuando terminamos Juli tuvo que ir al baño así que yo aproveché y le escribí a los chicos.

Las bitches 💅🏻"

¡SOY NOVIA DE JULI!

Ana 🤍: ¿Que?

Sebas ❣️: Dime que no es una broma.

Reunión en mi casa ahora.

Ana 🤍: ¿Ya estás allá?

No pero ya voy en camino.

Sebas ❣️: Está bien, ya vamos para tu casa.


Apague mi celular y vi que Juli ya venía así que me puse de pie.

— ¿Lista? — Pregunto.

— Así es. — La bese y luego le quite la mancha. — ¿Para quien es eso amor? — Señale su bolsa.

— Es para mi hermana, ella ama demasiado el helado y vi su sabor favorito saliendo del baño así que quise comprarselo.

— Que ternura de hermana eres, la mía solo invade mi privacidad y me molesta.

— Pero apuesto que te quiere.

— Supongo. Bueno vámonos.

Salimos de la heladería, ella me abrió la puerta de su auto, le agradecí, ella rodeo el auto y luego se subió y arranco.

Me enamore de la mesera. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora