Excepto tú || SunSun

Vingt

No tengo ni la menor idea de qué hacer ahora.

Estaba claro que el tal Benjamín Cromwell no era el verdadero, pero... ¿y si lo es? ¿Y si se curó?

Mandar a Soobin a investigar ya me había traído problemas, así que no debería de hacerlo, pero... No se me ocurre ninguna otra manera de saber quién es él realmente.

Tomé el teléfono y marqué el número de Choi.

—¿Es posible cambiar de objetivo? —dije, tan pronto como contestó.

—Sí, joven Kim —dijo—, ¿desea hacerlo?

Dudé.

No era bueno esto, pero nada de lo que hacía era bueno así que está bien.

—¿Recuerdas al chico que vive con Sunghoon Montsco? Bueno, supuestamente él es Benjamín Cromwell, pero estoy casi seguro de que no lo es —dije y suspiré—. Quiero que lo sigas y averigües todo lo que puedas acerca de él.

—Haré mi mayor esfuerzo —suspiró—. Conseguir información acerca de Sunghoon fue complicado, no quiero imaginar que tan difícil será conseguir información acerca del chico —tiene razón... Por teléfono él me contó que no encontró ningún tipo de documentación de Sunghoon, tal vez encontrar algo acerca de Benjamín sea imposible—. En cuanto sepa algo se lo haré saber.

Terminé la llamada.

La primera parte de la historia que me contó Benjamín sonó realista, pero... Según mi diario Benjamín Cromwell tiene la misma edad que yo, además se supone que es pelirrojo y de ojos color avellana. El Benjamín Cromwell falso tenía el cabello castaño y ojos color marrón. Además en el directorio que encontré en internet decía que Benjamín Cromwell residía en Broadway, New York y el Benjamín Cromwell falso dijo que está viviendo con Sunghoon momentáneamente.

Bufé cansado, decidí dejar de pensar en eso.

Los días pasaron, la puerta de mi oficina siempre tenía seguro y yo ya no salía a las juntas, sino las personas con las que tenía las reuniones venían a mi oficina y todo eso para evitar ver a Sunghoon. Aunque probablemente no le importo.

Después de un largo día de trabajo regresé a casa y enfrente de la puerta de entrada había un sobre amarillo, sabía lo que significaba así que lo tomé rápidamente, entré a casa y subí a mi habitación.

"Nombre: Riki Bullock
Edad: 20 años
Fecha de nacimiento: 25 de enero de 1997
Tipo de sangre: O+
Ciudad Natal: Baltimore, Maryland
Estudios: Hasta primer semestre universitario
Familia: Tobias Bullock (padre), Carter Bullock (madre)
Domicilio: Goldcast, Grimshell #127 (actualmente vive con Sunghoon Montsco)
Rutina: Indefinida."

Esto sólo me confundía aún más... ¿A qué estaba jugando Riki Bullock? ¿Por qué querría hacerme creer que es Benjamín Cromwell? ¿Por qué inventaría una historia como la que dijo?

Estaba molesto, muy molesto.

Salí de mi habitación, bajé las escaleras y me preparé para salir.

Solté un último bufido antes de salir de la casa para comenzar a caminar sin rumbo.

Tenía que aclarar mi mente y pensar seriamente qué hacer después.

Pensaba en silencio, estaba concentrado en el sonido de mis pasos.

Era peligroso que saliera a caminar si llevar medicamento por si un accidente ocurría, pero realmente no importaba ahora.

Alguien comenzó a caminar a mi lado, no le di mucha importancia y seguí con mi camino.

—¿Qué haces aquí? —preguntó.

Esa voz, era imposible que no la reconociera.

—¿Qué haces aquí tú? —respondí sin dejar de caminar y sin mirarlo.

—Bueno, te vi caminando y quise acompañarte —rió—, además sé que adoras mi compañía.

Bufé.

—Uh... Rik- es decir, Benjamín me contó que te fue a ver —soltó sin más.

Paré en seco. ¿Será que desde el principio todo fue un plan para sacarme dinero o algo así? ¿Será que ellos dos investigaron sobre mí y mi pasado para aprovecharse?

Al ver que no respondía Sunghoon tomó mi mano y me guió a una banca que estaba cerca.

—Supongo que te contó todo...

—Ah, yo...

—Perdón por mentirte —dijo interrumpiéndome—. Perdón por ocultar todo eso, pero quería mantenerte a salvo, no sé si mi padre aún me busca a mí y a mi madre y decir que era un tipo llamado Sunghoon Montsco fue lo único que se me ocurrió.

—¿Qué?

—Espera... ¿Riki no te contó todo?

Negué con la cabeza.

—Maldita sea —dijo molesto.

—Tú eres Benjamín Cromwell.

El pelirrojo sonrió nostálgicamente, posicionó su mano sobre mi mejilla y me atrajo hacia él uniéndonos en un beso.

No entiendo muy bien que sucede, pero parece que todas mis dudas se resolverán pronto.