𝐏𝐒𝐈𝐂𝐎𝐏𝐀𝐓𝐀 + 𝟐𝟏 |𝐒𝐚𝐧𝐳𝐮 𝐇𝐚𝐫𝐮𝐜𝐡𝐢𝐲𝐨|

𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝟹𝟼

36. Recuerdos

• T/N •

Después de haber tenido esa horrible pesadilla hoy por la mañana me levanté de un mejor ánimo...el hecho de que Haruchiyo esté cerca de mi, me hace sentir la persona más protegida en el mundo.

Se que él y yo hemos pasado por situaciones desastrosas y que si de mi dependiera lo borraría al instante, no es bueno ni saludable mantener relaciones tóxicas y es irónico porque a pesar de todo lo que pase con el y todo el sufrimiento, de alguna manera sentí que es <<amor>> pero la verdad es todo menos eso ó al menos antes de...

Me alegra sentir que Haruchiyo haya podido con esto y su enfermedad, pero también creo que la familia ha sido y es un pilar importante para él.

Quizás me hubiera gustado tener una madre como la de Sanzu...pero la mía me abandonó y aunque no tengo nada que reprochar por la vida que viví antes, siento que las cosas están para mejorar, me siento tan agradecida conmigo misma.

Hoy me encuentro comprometida con la persona que más amo, es lindo sentirse amada y espero que este amor/respeto no se vaya de la noche a la mañana, siempre pido por nosotros, bueno ahora somos tres...un integrante se suma a esta familia que está creciendo poco a poco.

Lo mejor de la mañana es que al levantarme note el esmero que ha puesto Sanzu en traerme el desayuno, aunque yo opino que es ayuda de su mamá...pero se que él lo intenta de todas las formas posibles y lo aprecio tanto.

El camino jamás será fácil.

Y es algo que losé muy bien, debo admitir que siento demasiado miedo por las cosas que se vienen más adelante y la verdad es que no se si pueda manejarlas todas.

Aún así debo dejar de estresarme por cosas que aún no han pasado.

Sanzu siempre será mi amor bonito, el primero...doloroso y cruel. No sé, cuanto tiempo pase, pero quisiera quedarme aquí donde está la calma y no la tormenta.

Haruchiyo me miro a los ojos una vez más.

— ¿Quieres algo más, cariño mío?

— Mmm...no, siento que ya es suficiente he comido demasiado.

— No me importaría si acabarás con toda la comida de la casa si eso te hace feliz, yo estoy más que encantado de cumplir cada uno de tus caprichos y lo sabes. — Me besó la frente.

Sonreí y tome de su mejilla para darle un beso, luego de eso el tomo de mis labios con sutileza para plantar tremendo beso.

— Cualquier cosa que se te antoje estoy a tus pies .— Río.— Mírame como me tienes.

— La bestia ha sido domada...pero a qué costó.— Mencione.

Los dos nos reímos fuertemente.

— Chicos, perdón por interrumpir. — Habló Miko.

— No pasa nada, solo estábamos hablando .— Agregó Haru y yo asentí.

— ¿Se quedarán para el almuerzo?