Capítulo 8 Arrogancia: Tercera parte

4 1 0
                                    

Sin embargo, después de acariciar el anillo por un tiempo, Jiang Cheng se obligó a contener su hostilidad.

Aunque estaba disgustado, como líder de una secta, necesitaba tener más en cuenta, lo que significaba que no podía ser tan impulsivo como Jin Ling. Después de la caída de la Secta Nie de Qinghe, entre las Tres Grandes Sectas, la Secta Jin de Lanling y la Secta Lan de Gusu fueron bastante cercanas debido a la relación personal entre los dos líderes. Al liderar la Secta Jiang de Yunmeng solo, ya estaba en una situación aislada de los tres.

HanGuang-Jun, o Lan WangJi, era un cultivador bastante prestigioso, mientras que su hermano mayor, ZeWu-Jun, o Lan XiChen, era el líder de la Secta Lan. Los dos hermanos siempre habían estado en buenos términos el uno con el otro. Era mejor no discutir abiertamente con Lan WangJi.

Además, la espada de Jiang Cheng, "Sandu”, nunca había hecho contacto real con la espada de Lan WangJi, "Bichen", y aún no era decidido en qué manos morirían los ciervos¹. Aunque poseía el poderoso anillo, "Zidian”, una herencia familiar suya, la cítara de Lan WangJi, "Wangji", también era conocida por sus habilidades. Lo que más odiaba Jiang Cheng era estar desventajado durante una pelea. Sin una confianza total en su éxito, no consideraría pelear con Lan WangJi.

Jiang Cheng lentamente retiró su mano izquierda, dejando de acariciar su anillo. Parecía que Lan WangJi estaba decidido a participar en este asunto, por lo que no ayudaría si continuaba jugando al antagonista. Jiang Cheng tomó la decisión de, por el momento, hacerle un favor, y se dio la vuelta para ver que Jin Ling todavía se tapaba la boca con enojo: –HanGuang-Jun quiere castigarte, así que déjalo hacerlo por esta vez. Tampoco es fácil para él disciplinar a jóvenes de otros clanes.

Su tono era sarcástico, pero no estaba claro de quién se estaba burlando. Lan WangJi nunca luchó para ganar su camino con palabras, y parecía que no escuchaba nada. Jiang Cheng se volvió de nuevo a Jin Ling, sus palabras cubiertas de espinas: –¿Por qué sigues parado allí? ¿Esperando a que venga la presa y se lanze a tu espada? Si hoy no atrapas a la criatura que caza en la montaña Dafan, ¡no vengas a verme nunca más!

Jin Ling lanzó a Wei WuXian una mirada dura, pero estaba demasiado asustado para mirar a Lan WangJi, la persona que lo había silenciado. Volvió a colocar la espada en su vaina, saludó a los dos mayores y se retiró con el arco en la mano. Lan SiZhui habló: –Líder de la secta Jiang, la secta Lan de Gusu devolverá el número exacto de redes captura-deidades que han sido destruidas.

Jiang Cheng se burló: –No es necesario.
Tomó la dirección opuesta y bajó con calma. El hombre que había venido del bosque lo siguió, haciendo una mueca porque sabía que sería imposible escapar de una conferencia cuando regresaran.

Después de que sus figuras desaparecieron, Lan JingYi habló: –¿Cómo pudo el Líder de la Secta Jiang actuar así?

Sólo después, recordó la regla del Clan Lan de no hablar a espaldas de los demás. Miró mansamente a HanGuang-Jun y cerró la boca.

SiZhui sonrió suavemente hacia WuXian: –Joven Maestro Mo, nos encontramos de nuevo.

Cuando Wei WuXian sacó las comisuras de su boca, Lan WangJi volvió a hablar: –Haz tus tareas.

La orden era simple y clara, sin ningún vocabulario sofisticado para decoración.

Los jóvenes finalmente recordaron la razón detrás de por qué vinieron a la montaña Dafan. Reunieron sus pensamientos y respetuosamente esperaron más instrucciones. Después de un momento, Lan WangJi habló nuevamente: –Haz lo que puedas. No fuerces nada.

La voz era profunda y atractiva. Si uno estuviera demasiado cerca, la punta de su corazón temblaría. Los jóvenes respondieron amablemente, temerosos de quedarse demasiado tiempo, y caminaron hacia las profundidades del bosque.

Wei WuXian pensó que, sin lugar a dudas, Jiang Cheng y Lan Zhan eran extremadamente diferentes entre sí. Incluso sus consejos para los chicos eran todo lo contrario. Mientras pensaba, de repente vio que Lan WangJi le daba un asentimiento casi imperceptible. Estaba bastante sorprendido.

Desde una edad temprana, Lan WangJi había sido tan primitivo y apropiado, que era doloroso verlo. Siempre había sido solemne y rígido, como si nunca antes hubiera estado animado. No podía dejar que un solo grano de arena apareciera en sus ojos, por eso nunca había aprobado que Wei WuXian cultivara el camino oscuro. Lan SiZhui probablemente ya le había informado a Lan WangJi de su comportamiento sospechoso en Villa Mo. Aun así, asintió en reconocimiento, probablemente agradeciéndole por ayudar a los jóvenes de la Secta Lan. Sin pensar, Wei WuXian inmediatamente devolvió un saludo. Cuando volvió a levantar la vista, Lan WangJi ya había desaparecido.

Después de detenerse por un segundo, se dio la vuelta para bajar la montaña.

No importa qué presa frecuentaba la montaña Dafan, no podía soportarlo. Wei WuXian podría luchar por eso contra cualquiera, excepto Jin Ling.

¿Por qué resultó ser Jin Ling?

Con tantos discípulos en la Secta Jin, realmente no esperaba que la persona que conoció fuera Jin Ling. Si lo supiera, definitivamente no se burlaría de él por "no tener una madre que le enseñe". Si alguien más le hubiera dicho las mismas palabras a este niño, WuXian les enseñaría lo que significa traer la desgracia a sí mismo con una conversación descuidada. Sin embargo, la persona que lo había dicho resultó ser él mismo.

Después de quedarse quieto por un momento, Wei WuXian levantó la mano y se dio una bofetada en la cara.

La bofetada fue fuerte y contudente, haciendo que le picara la mejilla derecha. De repente, escuchó sonidos arrastrados que provenían de un matorral al costado, y WuXian vio un burro emerger desde el matorral. Cuando dejó caer la mano, el burro se acercó solo, a diferencia de otras veces. Wei WuXian tiró de sus largas orejas y forzó una sonrisa: –Querías salvar a la damisela en apuros, pero me pediste que fuera el héroe del rescate.

El burro se quejó, justo cuando una ola de cultivadores se acercaba desde el fondo de la colina. Después de que las cuatrocientas redes captura-deidades fueron destruidas por la espada de Lan WangJi, los cultivadores vacilantes en Pies de Buda se apresuraron de nuevo. Todos aquí probablemente eran oponentes de Jin Ling. Wei WuXian consideró por un momento, si hacerlos retroceder o no por la fuerza. Pero, después de pensarlo, terminó caminando silenciosamente, dejándolos pasar.

Los discípulos de diferentes sectas, que vestían uniformes de diferentes colores, se quejaron mientras caminaban: –Tanto la Secta Jin como la Secta Jiang estropean demasiado al Joven Maestro Jin. Todavía es muy joven, pero ya es tan arrogante y grosero. Si le dejan liderar la Secta Jin de Lanling, ¿quién sabe qué caos sucedería? Creo que ni siquiera sobreviviríamos.

Wei WuXian redujo su ritmo.

Una cultivadora de corazón blando suspiró: –¿Cómo no pueden malcriarlo? Perdió a sus dos padres a una edad tan temprana.

–Shimei², no es así como funciona. ¿Y qué, si ambos padres murieron? Hay toneladas de chicos que perdieron a sus dos padres. Si todos actuaran como él, ¿qué pasaría?

–Me sorprende que Wei WuXian haya sido lo suficientemente cruel como para hacerle daño. La madre de Jin Ling era la hermana mayor de nacimiento de Jiang Cheng, la shijie³ que lo crió.

–Realmente fue muy malo para Jiang YanLi, criar un lobo que muerde la mano del dueño. Jin ZiXuan lo tuvo aún peor. Sólo porque tenía algo que ver con Wei WuXian, terminó así.

–¿Por qué Wei WuXian tiene algo que ver con todos ...?

–En efecto. ¿Lo has escuchado estar cerca de alguien más que los perros locos que crió? Sus enemigos estaban en todas partes, e hizo mal a todos. Incluso con HanGuang-Jun, eran como fuego y agua, y se odiaban mutuamente.

–Hablando de eso, hoy, si no fuera por HanGuang-Jun...

Después de caminar por un momento, los sonidos de un chorro de agua llegaron a los oídos de Wei WuXian.
No escuchó esto cuando apareció. Wei WuXian finalmente se dio cuenta de que avanzó por el camino equivocado hacia abajo de la montaña, y hacia otro que se bifurcó.

Sosteniendo las riendas del burro, se paró junto al agua corriente. La luna se podía ver en lo alto del cielo. Sin ramas ni hojas en las orillas del arroyo, fragmentos de blanco se reflejan sobre la superficie. En el reflejo, Wei WuXian vio una cara, siempre cambiante por el flujo del agua.

Golpeó con la palma de la mano en el agua, disolviendo las características ridículas. Levantó sus palmas húmedas y se limpió el polvo en la cara.

Un joven apuesto y elegante apareció en los reflejos del agua. Parecía tan puro como si hubiera sido limpiado por la luz de la luna, con cejas lisas, ojos brillantes y labios curvados ligeramente hacia arriba. Sin embargo, mientras bajaba la cabeza para mirarse a sí mismo, las gotas de agua que colgaban de sus pestañas cayeron, como si fueran gotas de lágrimas.

Era un rostro joven y desconocido, no el Patriarca de YiLing que había volcado el mundo y matado a miles: Wei WuXian.
Después de mirar un poco más esta cara, Wei WuXian se limpió la cara nuevamente y se frotó los ojos. Se sentó junto al arroyo con un ruido sordo.

No era como si no pudiera soportar las palabras de ataque. Después de todo, cuando tomó la decisión de abandonarlos, entendió completamente las situaciones que tenía que enfrentar. Desde entonces, se había acordado del lema de la Secta Jiang de Yunmeng: hacerlo incluso si fuera imposible.

Sin embargo, aunque pensó que su corazón era como una piedra, al final, todavía era humano, no una hierba o planta sin emociones.

El burro parecía como si supiera que no estaba de buen humor, y por una vez, no estaba siendo ruidoso por impaciencia. Pasó un momento de silencio y se dio la vuelta para irse. Wei WuXian se sentó junto a la corriente, sin responder en absoluto. Se dio la vuelta para mirar, arrojando sus cascos al suelo, pero WuXian todavía no le prestó atención. El burro tuvo que volver de mal humor, mordiendo y tirando de la esquina del cuello de la túnica de WuXian.

Podía elegir ir, y podía elegir no ir. Al ver que el burro había ido tan lejos como para usar su boca, Wei WuXian decidió seguirlo. El burro lo llevó a unos pocos árboles y rodeó un área de hierba. En la hierba, había una bolsa qiankun, con una red dorada irregular colgando sobre ella. Probablemente se cayó cuando un desafortunado cultivador luchó para salir. WuXian recogió la bolsa y la abrió.

Había bastantes artículos en él, como calabazas de licor medicinal, talismanes, espejos en miniatura que reflejan demonios, etc.

Rebuscó un rato y sacó un talismán. Inmediatamente, una bola de fuego apareció en su mano.

El objeto ardiente era un talismán que quemaba tinieblas, el cual, como sugería su nombre, usaba energía oscura como combustible. Se quemaría automáticamente si entrara en contacto con la energía oscura. Cuanta más energía había, más fuerte era la llama. Se encendió tan pronto como se sacó, lo que significa que había un espíritu no muy lejos de Wei WuXian.

Al ver la luz del fuego, Wei WuXian lo sostuvo para detectar la dirección del espíritu, observando atentamente.

Cuando se volvió hacia el este, el fuego se debilitó; Cuando se volvió hacia el oeste, el fuego se intensificó de repente. Dio unos pasos hacia la dirección y vio una figura blanca y encorvada aparecer debajo de un árbol.

El talismán había terminado de arder, y las cenizas cayeron de la punta de sus dedos. Un anciano estaba sentado de espaldas a él, hablando en débiles murmullos.

Wei WuXian se acercó lentamente. Las palabras que murmuró el viejo se hicieron claras.

–Duele, duele.

WuXian preguntó: –¿Dónde le duele?

El viejo respondió: –Cabeza. Mi cabeza.

WuXian pidió: –Déjeme echarle un vistazo.

Dio unos pasos al lado del viejo y vio un gran agujero ensangrentado en la frente. Este era un fantasma, probablemente asesinado con un arma que se estrelló contra su cabeza. Estaba vestido con una túnica de entierro hecha con material fino y artesanía, lo que significaba que ya había sido ataviado y enterrado adecuadamente. No era el alma que un humano vivo había perdido.

Sin embargo, fantasmas como este no deberían haber aparecido en la montaña Dafan.

Wei WuXian no encontró una explicación a este escenario inverosímil. Sintiéndose bastante preocupado, saltó sobre la espalda del burro, lo golpeó con un grito y cabalgó hacia la dirección desde donde Jin Ling subió la montaña.

Alrededor del área de las tumbas antiguas, había muchos cultivadores que deambulaban, con la esperanza de que una liebre se estrellara contra el tronco del árbol⁴. Alguien se atrevió a sostener una bandera de atracción espiritual, pero sólo atrajo a un grupo de espíritus oscuros que lloraron desesperadamente.

Wei WuXian tiró de las riendas, observó, y preguntó en voz alta y clara: –Disculpen la interrupción, pero ¿a dónde fueron los jóvenes maestros del Clan Jin y el Clan Lan?

Efectivamente, después de lavarse la cara, la gente realmente lo trató mejor.

Un cultivador respondió: –Se fueron de aquí, al Templo de la Diosa.

WuXian inquirió: –¿Templo de la Diosa?

El clan rural que había encontrado antes había vuelto a escabullirse por la montaña y se unió al grupo de cazadores nocturnos, después de enterarse de que todas las redes captura-deidades fueron destruidas. El hombre de mediana edad reconoció su ropa y al burro haciendo muecas, dándose cuenta de que era el loco que los había salvado antes. Se sintió bastante incómodo y fingió que no había pasado nada.

No obstante, la chica de cara redonda le mostró el camino: –Allá. Es un templo divino en una cueva en la montaña.

Wei WuXian preguntó de nuevo: –¿Para qué deidad está construido el templo?

La chica de cara redonda habló: –Creo que es una estatua de piedra natural de una diosa.

Wei WuXian asintió: –Gracias.

Después de la conversación, inmediatamente corrió hacia la dirección del Templo de la Diosa.

El matrimonio del perezoso, el relámpago que destruyó los ataúdes, el prometido comido por los lobos, el padre y la hija perdiendo sus almas, la ropa extravagante del entierro... Era como si una cuerda estuviera siendo atravesada por todas las cuentas, uniendo todo en un hilo perfecto. No es de extrañar que las brújulas del mal no señalaran nada, y que las banderas de atracción espiritual tampoco funcionaron. Todos habían subestimado a la criatura en la montaña Dafan.

¡No era para nada lo que pensaban!

⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️⛩️

¹O sea que no se sabía quién de los dos era más poderoso.

²Shimei significa hermana menor marcial, suele usarse para hablarle a alumnas que entraron a estudiar en una generación posterior a la propia, no siendo necesariamente una hermana real. Para referirse a una hermana menor de sangre, es más frecuente “Meimei” o “a-mei”.

³Shijie es la hermana mayor marcial, (que estudió en una generación anterior a la propia). Siendo hermana mayor de sangre, se usa “Jiejie” o “a-jie”.

⁴Cazar algo sin esfuerzo

Los tíos de Jin LingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora