Que mierda fue eso!!??
El seguía hablando, y yo no decía ni una palabra, incrédula de su descaro.
Pero no le dije nada, no quería que creyera que le di demasiada importancia.Decidí hacerme la tonta y dejarlo pasar, pero en mi mente aún seguía pensando lo mucho que me había gustado ese arrebata miento de el.
-Para que la guitarra?-insistí.
-Para que crees? Para tocar-dijo obvio.
-entonces, toca.
-No
-Por que no?-le dije enojada.
-Por que me da vergüenza.Jamás he dejado que alguien me escuche-sus pómulos se llenaron de rubor y su sonrisa se transformó en una mueca nerviosa.
-Peor que yo no puedes ser-le dije.
El río.
-Es cierto cantas terrible.-Le pegue un puñetazo en el brazo-Al menos hagamos un trato.
-Que cosa?
-Yo toco, sí me cuentas un secreto que nadie más sabe-Ya estaba abriendo la boca en un gran "NO", pero Bryan extendió sus pestañas como dos gigantes abanicos, e hizo un puchero que lo haría parecer al gato de sherk.
-!Quita esa cara! Yo no...-empezó a gemir con pena-Esta bien, está bien, ya, lo haré.
El sonrió tomo la guitarra por el lado izquierdo y comenzó a tocar.La canción tenía un toque mágico, pero lo que en realidad me hizo alucinar, fue su voz.Escucharlo cantar era como entrar al cielo, y el era el ángel más hermoso de todos.
Bryan hizo que mi corazón dejara de palpitar unos segundos, mi cuerpo no fue pendiente más que de la música y de grabar aquel momento en mi memoria como un tatuaje.Esa canción marcó un antes y un después sobre mi percepción sobre Bryan.
Antes creía que era simpático, bastante lindo y caballero.Pero luego de escucharlo cantar, supe que no había persona capaz de estremecer mi corazón como el lo había hecho.
Término la canción y yo aún no podía cerrar la boca.
-Y bien?-pregunto algo asustado.
-Fue... fue impresionante Bryan.No tengo palabras suficientes para decirte lo hermoso que fue- le dije lo más sinceramente posible.
Respiro aliviado.
-Uff... que bien.Pensé que no te iba a gustar.sonrei.Que lindo era.
-Estas loco? Es lo mejor que he oido.
-Tranquila cuando quieras te doy mi autógrafo-bromeo-Bueno, ya hice mi parte, ahora te toca a ti.
-Esta bien, pero júrame por tu vida que jamás se lo dirás a nadie.
-Te lo juro por mi vida.
-Algo más importante que tu vida?
-Como que no es importante-se hizo el ofendido-Ya se, dame tu mano.
Bryan alzó su mano derecha y la dejo en el aire.Yo apoye mi mano, y me miro a los ojos.Poco a poco, entrelazo sus dedos con los míos.
Así con las manos en el aire, me dijo:
-Te prometo ______ , que jamás contare tus secretos, y te juro que desde este momento, no dejaré que nada arruine tu vida-me regaló una hermosa sonrisa-No creas que te dejare ir tan fácilmente.
Nos soltamos y yo no podía contener mi felicidad.
-Eso está mejor, te diré-me miro interesado-Se que es tonto, pero me gusta dejar papeles escondidos en cualquier parte.Me gusta pensar que alguien los encontrará y tendrá algo diferente e qué pensar.
-Que escribes?-se escuchaba con una condición casi condisiosa, como sí mi secretó fuera un tesoro que sólo el sabría donde encontrar.
-Cualquier cosa, frases, pensamientos-me encogí de hombros.
Me sonrió dulcemente
-Me habría encantado haber encontrado uno-dijo-Gracias, Que te parece un café?
Y así empezaron tres semanas en las que mi vida comenzó a cambiar.Bryan se estaba convirtiendo en mi mejor amigo, en mi confidente y mi amor platinico;todo al mismo tiempo.Había veces que me sorprendía a mi misma sonriendo de la nada.Hasta que, claro, llegaba a mi casa y se escuchaban los portazos y los gritos.Matt se había ido de vacaciones por un mes a Nueva York, por lo que me pude librar.
Mi relación con Bryan era de amigos, aunque de vez en cuando tomaba un giro peligroso.
Un día fui a su casa, estábamos solos, y empezamos a cocinar panques.Empece a hacer la mezcla, en lo que el buscaba la harina, mala idea.Apenas me di la vuelta, me sopló toda la harina en la cara y se río burlonamente.
-Te crees muy gracioso, eh Mouque ?-tome el saco de harina y se lo tire en todo el pelo.Primero se quedo parado, algo anonadado, pero enseguida busco venganza.
-Estas muerta-dijo en un silbido.Yo reí y empece a correr por la cocina, pero término por alcanzarme y terminamos tirados en medio de una nube blanca, riéndonos a más no poder.
-Eres un tonto Bryan-le dije, intentando empujarlo para que saliera de encima de mi.
-Y tu una pésima cocinera-dijo-Aunque algo linda.
Yo me quede callada.Siempre que pasaba algo así no hallaba nada mejor que hacer.
-Admitelo _____ yo te atraigo-me dirigió una mirada expectante y sexy al mismo tiempo.Me concentre lo más posible, de lo contrario sabía que diría una ridiculez.
-Bryan yo tengo novio-dije mientras me sentaba para soltarme de esa incómoda posición.
-Y? El tipo es un completo idiota.
-Lo sé pero el no siempre es así, el me...-empece.
-!No _____, el no te quiere- me atajó, con sus palabras llenas de odio.Por primera vez en mi vida, aguante las ganas de llorar, y me hice la fuerte.
-!Basta Bryan entiéndelo! !NO VOY A ESTAR CONTIGO!