𝐶𝑎𝑚𝑏𝑖𝑜 𝑑𝑒 𝑃𝑒𝑟𝑠𝑜𝑛𝑎𝑙𝑖𝑑𝑎𝑑╏𝑍𝑒𝑟𝑎

Mirando

Habían pasado unos días, desde lo que le pasó a Zeus, estaba actuando normal por el momento

Hera se reuniría con Afrodita ese día, ya que la primera tiene algunas incógnitas, que la piel rosa debe responder.

Cuando Hera le dijo a Zeus, el pelo azul frunció el ceño

-Y ¿podría ir contigo, Hera?

-Mmmm, creo que no sería una gran idea, acuérdate que Apolo, te dijo que no salieras del Olimpo por una semana -dijo Hera seria viendo al peli azul- Podría ser dañino para tu salud

-Pero el no tendría porque enterarse s-seguía de terco- Porfavor Hera, no quiero quedarme solo, mientras o estás -pataleo un poco y se veía adorable.

-Ya tomé la decisión, nos vemos en un rato.

Hera solo rodó los ojos y se fue por donde Afrodita, lo que no sabía Hera es que Zeus mando a Hermes a vigilar

¿Por qué?

Bueno... quiere ver qué hace y con quién se junta, según su lógica Hera, la mujer más bella existente y muchos hombres se interesarían en ella.

-Hera es mía -Dijo frunciendo el ceño viendo cómo la rubia caminaba.

La diosa del amor, estaba buscando una cosa que se le perdió por distraída, mientras que se perdía en su mente, alguien tocó la puerta.

Afrodita fue a abrir pensando que era alguno de sus hijos, pero se llevó una gran sorpresa al ver a Hera con su típica mirada seria.

-Hera, que sorpresa verte aquí -Dijo la diosa amorosa, sonriendo con una carita nerviosa.

-Necesito hablar contigo, ¿Puedo pasar? -La morena al ver que la otra diosa asintió y entró a su hogar-. Bueno seré directa, no te he visto salir desde el día del accidente, ¿se puede saber, por qué?

Afrodita estaba más nerviosa que nunca.

-Mmmm bu-bueno es que y-ya no me gusta salir como a-antes, jeje -Hera tenía una mirada fija en ella-. Y de t-todas formas, ¿Como sabes que no he salido en un gran tiempo?, ¿Es que me acosas o que? -lo último lo dijo de broma.

Aunque... puede que eso último, sea cierto.

-¿Ocultas algo o pasa algo y no quieres decir, Afrodita? -La reina, arqueó una ceja, su aura mostraba seriedad.

Hera aún veía fijamente a la diosa amorosa, que empezaba a sudar, todo el ambiente estaba muy callado, se hubiera mantenido así, sino se hubiese, escuchado un sonido afuera del aposento.

Ambas diosas fueron a ver qué era, solo vieron ramas, y hojas volando por el aire, pero también vieron marcas de tenis en la tierra, ¿y quien es el único Dios que corre y usa tenis? Respuesta: es Hermes

Ese chico volvió a las andadas.

-Hermes estuvo por aquí -Dijo Afrodita-. Creo que estuvo espiandome otra vez.

Hera levantó una ceja.

-¿Suele espiarte a seguido? -Afrodita asintió.

-Tu no sabes la cantidad de veces que lo he visto observarme, es un maldito morboso y chismoso, pero aveces también espía a todos, hasta a ti y a Zeus -Afrodita frunce el ceño.

-Eso explica porque siento ojos que me ven dormir -Dijo Hera, mirando a la nada, con algo de miedo-. Pero aquí la gran pregunta es ¿Qué demonios hizo?

-Probablemente solo quería tener información sobre algo o no se, o talvez Zeus le dijo que viniera aquí -dijo Afrodita, tratando de hallarle lógica a la situación.

Hera quedó pensando, en lo último que dijo la tez rosada, ella podría tener razón.

-Tengo que ver a Zeus, nos vemos mañana -La morena se fue.

Afrodita suspiro de alivio.

-¡Fiu! Bueno ahora seguir con lo que estaba -La diosa regresó caminando tranquilamente a su aposento-. ¿¡DONDE ESTARÁ ESA MALDITA PÁGINA?!

Cuando la reina, llegó al castillo, escuchó un grito de dolor, pero no era de cualquier sujeto, ese gritó era de Apolo, Dios del sol y de la medicina.

Eso le pareció muy curioso.

No le importaría lo que uno de los bastardos de su marido hiciese, pero estaba vez se sentía curiosa al respecto.

Había un ambiente extraño por ahí.

Empezó a caminar un poco más rápido.

-¡Tengo que ver eso! -Pensó Hera acelerando el paso y vió una escena, con una Artemisa llorando y Apolo desmayado en el piso-. ¿Pero que demonios ha pasado aquí?