Me despedí del sentimiento
dándole entrada al desenfreno,
al querer con medida,
al dejarlo a medias.Pero ya sé que soy torpe y tuviste que encontrar la falla,
destruir mi plan maestro de condenarme a vivir sin besos.
Pusiste en mi boca cerrada tu alma abierta
y ahora he vuelto a escribir,
sin mucho que alegar y demasiado por sentir.Mis noches se tatuaron tu nombre
y cocieron las caricias con los hilos de mi almohada.Y no busco sexo,
y no busco exceso,
y no necesito nada.Bastó con echar a patadas de nuestras almas
a ese amor moderno que caduca
a los veintitrés besos
al tercer deseo
y a la primera llamada.

ESTÁS LEYENDO
Sol de lobos
PuisiSinopsis He deseado darle inicio al proyecto tan hermoso, no de escribir, sino de buscar la inmortalidad. Entre tanta gente que entiende lo que desea, y otras tantas que jamás podrán explicárnoslo, yo quiero hacer de mi desastre una obra. Desafiando...