Amargada [Tamara × Lectora]

Capítulo siete🍭

Estabas en el cuarto de la castaña de cuernos, mientras esperabas que hablase, inspeccionabas su cuarto con la mirada notando cosas como revistas para adultos o garabatos.

- Vale guapa, solo queriendo hablar, no de algo específico, pero ahora se me ocurrió algo.- Mientras esta hablaba se te acercaba de a poco.

Tu la empujaste lo suficiente para que quedara en su lugar de nuevo.

- ¿Podrías por favor decirme que necesitas?- Dijiste con una mirada seria aunque por dentro los nervios te comían.

- Me gustan las personas que tienen carácter.- La chica continuaba insinuándose. - Pero en fin, mi pregunta es ¿Tienes algo con Tamara? Como ¿Algo serio?-

- M-Mhm. No se como lo vea ella, pero para mi va enserio lo que tengo con ella.- Dijiste firme cruzandote de brazos.

- Vamos, ella apenas tiene algo de cuerpo, a comparación mía. Además, te conseguiría lo que quieras.- La chica comenzó a acercarse a ti.

- No estoy con Tamara por su aspecto ni dinero. Además apenas te conozco ¿Crees que saldré contigo a cambio de Tamara? La conozco desde que tengo memoria.- Esta vez la empujaste mas bruscamente.

- ¿Que si la conoces hace mucho? Con una cita cambiarías de opinión.-

- Eres realmente desagradable, estando en los zapatos de Tamara también me habría ido de aquí viendo que estás.-

- ¿Que ganas hablándome así? Lo mas que conseguirás es un halago de Tamara.-

- Más que perfecto.- Decidiste salir del lugar sin siquiera voltear a ver a la castaña de cuernos.

- ¡______! ¿Que te dijo? ¿Te dijo algo malo? ¿Quieres que la golpee?- La de cuencas negras fue a abrazarte.

- No Tam, estoy bien, pero que lindo que quieras golpearla por mi.- Dijiste de forma sarcástica.

- Lo que tu desees son ordenes.- Esta también rió para soltarte un poco de abrazo. - En cualquier forma ¿Que te dijo?-

- Cosas incómodas, no importa.- Pusiste una mano en su hombro sonriendo.

- No ¿Que cosas incómodas? No puedes dejarlo así.- Te tomó de los hombros acercándose a ti.

- Cosas como que eres una plana en todo sentido, aburrida y que apenas podría darle un helado a ______ de todo lo que ella querría.- Habló la de cuernos apoyada en el marco de su puerta.

- Esa es solo tu opinión.- Volteaste a ver enojada a la de cuernos.

- Se que también piensas así, linda.- Esta te lanzó una sonrisa.

Viste como la de cuencas negras se apresuró a golpear a la de cuernos, esta respondió con otro golpe y en pocos segundos estaban peleando y jaloneandose.

- ¡Las dos paren mierda!- Trataste de separarlas pero en el proceso recibiste un golpe de la de cuernos.

- ¡Mierda! ¡______, lo siento!- La chica trataba de acercarse. La empujaste y te llevaste a jalón a la de cuencas negras.

[...]

- ¿______? ¿Estás enojada? Lo siento por la pelea, es que...- La chica se quedó en silencio dándose cuenta a donde la llevabas.