Cap 25

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Cap. 25

Me tuve que sentar con Alice ¿Que remedio?

Alice = Lían. Dolor de cabeza en 3...2...1

-Hey ya vine-dijo Lían normal-¿Qué haces acá?

-La invite -dijo Alice, sonriendo

Lían hizo una expresión de "como digas" y se sentó como si nada.

Me mantuve callada todo el almuerzo. Lían es una de esas personas que siempre SIEMPRE tienen razón. Y yo digo muchas estupideces. Además no quiero quedar mal frente a Alice, hace mucho que no nos reuníamos; Antes éramos mejores amigas y hace un mes apenas se acordó de mi existencia.

-Hagan grupos-dijo el profesor de Educación física. Otra vez todos haciendo grupos de 6 y de 5, menos algunas personas , entre ellas estoy yo.

A todos los marginados nos pusieron en un grupo diferente.

Me toco con compañeros de distinto curso... PUTABIDA...

Al menos me hubiera tocado con alguna que otra amiga o con algún amigo, pero no conozco a nadie. Tendré que quedarme callada, otra vez

_

¡IU QUE ASCO!

Hay carne cruda... yo la tengo que tocar, tengo que tocar y cortar pedazos de carne cruda para poder comer...PUTABIDA

No es que no me guste la carne. Es una jodida delicia, pero me da asco, impresión y pena

¿Por qué pena? Por los pobres animales que tuvieron que enterrarle, el cuchillo o ese frio metal, en su cuerpo.

¿A ustedes les parece que tengan que sufrir así?

Hasta recuerdo cuando era chiquita, me quise hacer vegetariana. Termine con Anemia pero bue, nadie puede decir que no lo intente.

-Hey —llame la atención de Melina, una compañera del grupo-¿Me cambias de tarea?-ella miro la carne y asintió.

Hora corto cebollas... ÑE...no esta tan mal como la carne

....

Por fin termine de cortar todas las cebollas.

Ahora solo tengo que cruzar todo el campamento para llevarlas debajo del puente.... Mierda.

*agarro  el volt con los pedacitos de cebolla, y me dirijo hacia la salida.

Hay muchos grupos yendo y viniendo con botellas de jugo, platos de carne, ají verde, tomate...<<HAY QUE RICO, BABEOOO>>.

Luego de pasar el pastizal y las rocas, por fin  llegó a una mini parrilla en el piso.*

Me quedo con el plato de cebollas en la mano cuando viene Nicho, otro compañero del grupo.

-¿Qué haces?-dice un poco irónico y molesto.

-traje las cebollas para cocinarlas- digo obvia pero dudativa. Le muestro el plato con las cebollas.

-Hay que pincharlas con la carne y el ají y luego lo traemos para poder cocinarlo-dijo con una cara de " sos tarada ¿o qué?" —Vamos.-dijo molesto y se dio la vuelta como para que lo siga y eso hice.

Todos me estaban esperando. Sus miradas estaban clavas de una manera no tan discreta (para anda discreta) en mi.

PU.TA.BI.DA

Después de mi admirable llegada todos empezamos a preparar las "brochetas"

Luego de 10 minutos ya preparamos todo. Volvimos a ir al lugar donde se encontraba la dichosa parrilla.

-Profe!- empezaron a llamar Nico y Meli, mientras Juana y yo observamos- Ya estamos. ¿Dónde está el encendedor?

Vino la profesora Silvana. Tiene unos 42, es pelirroja (teñida por supuesto) y  petisa. Lleva una remera musculosa celeste-gris y un pantalón, que no le cobre menos de la rodilla, beige. —Lo tiene el otro grupo- señalo con el pulgar atrás de su hombro- Esperen mientras tanto.

La torpe vida de la torpe chica # 00Donde viven las historias. Descúbrelo ahora