HABLEMOS DE BARTY

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Un hermoso día en domingo, en alguna casa de campo se encontraba reposando el cuerpo de un Mortífago fugitivo de Azkaban, y no era el famoso Sirius Black.
Barty Crouch estaba aún recostado en su cama, había escapado de Azkaban hace un año, ahora vivía con Peter Pettigrew. El insomnio no lo dejaba dormir, más bien nunca podía dormir, tenía unas enormes ojeras un poco de vello en la cara por no rasurar se y los pensamientos revueltos.
Barty Crouch jr, el fugitivo de Azkaban había perdido la cordura haca mucho tiempo, todos en la escuela lo llamaban loco Crouch y no le molestaba porque el sabía que lo estaba, estaba loco por Regulus. Era su única locura. Pero la real llegó, cuando murió Regulus Black la persona que Crouch más amaba en el mundo la verdad locura se apoderó de él. Y ya no había vuelta a tras.

El castaño sintió como el cuerpo desnudo y caliente de Peter Pettigrew lo abrazaba, el estaba volteado de un costado con los ojos abiertos mirando a la nada, siendo atacado por sus recuerdos, como todos los días a todas horas.

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— ¿Nunca me dejaras Barty..? — preguntaba un joven Regulus.

— Jamás Reggie. Lo prometo. — decía abrazándolo un joven y cuerdo Barty.

— Te quiero mucho Barty.

— Yo te amo Regulus. — decía cuando el cuerpo de su amigo callo dormido en un profundo sueño. — Y te amare por siempre.

Después de una crisis de nervios que había tenido un Regulus de ese entonces solo catorce años.

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Buenos días Barty. — la voz de Peter lo saco de sus recuerdos. — Ya es tarde, deberíamos levantarnos.

Sintió como los labios del rubio besaban su mejilla, dejando un pequeño beso ahí.

— Buenos días Peter, si hay que levantarnos. — dijo parándose sin más y dirigiéndose al bañó.

Peter al ver la reacción tan seca de Barty supo que había estado pensando en Black otra vez, y lo odiaba, odiaba no poder tener a Barty para el solo. Odiaba que Barty no pudiera dejar los recuerdos de el.

Por su parte Crouch estaba en el baño lavando se la cara.

— Si James no hubiera llegado a mi corazón antes, sería tuyo y solo tuyo Barty.

Esas palabras lo seguían atormentando, <<Si Potter no hubiera llegó a nuestras vidas Regulus, tú serías libre... Y estarías vivo.>> Pensaba Barty.

Sabía lo que tenía que hacer, ya tenía la poción lista.

Abrió la llave de la bañera y busco entre los cajones del baño cigarrillos y un encendedor. Se desnudo por completo y entro a la tina, el agua estaba caliente eso lo relajaba era lo que más le gustaba de las mañanas, darse un baño de agua caliente. Solo se quedaba ahí con los ojos cerrados en el agua mientras fumaba asta acabarse el paquete; se daba largas duchas de casi una hora, mientras Peter preparaba el desayuno.

Peter... Desde la muerte de Regulus Peter no lo a dejado solo, lo ayudo a escapar de Azkaban y lo había llevado a vivir con, el Maldito había fingido su muerte y había inculpado a Sirius Black.

Peter se enamoro de Barty y Crouch lo sabía, pero el sentimiento no era recíproco. Barty no sentía amor por Peter por más que intentará amarlo, para el solo era un fantasma, una distracción para olvidar lo único en su vida que le daba plenitud. Regulus.

†El Fantasma de Regulus Black.†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora