La bailarina 2, dibujando el baile perfecto.

Capítulo XIX: Salomé.

Después de unos minutos tanto Salomé como la Abuela de Angel, llegaron al parque donde estaba sentado.

- Hija, ahí esta Angelito, vamos.
- Dejame ir sola mamá.
- Esta bien.

Salomé camino y se sento a un lado de Angel mientras la abuela se quedaba a unos metros.

- ¿Que haces acá? Dijo el joven con lágrimas en su mejilla.
- Eres mi hijo, no te iba a dejar solo.
- Disculpame por dejar la fiesta, no queria arruinarla.
- Entiendo.
- Ella tiene razón, la deje.
- Si, pero tu también la tienes.
- No podemos tenerla ambos.
- Eso creía yo hasta que aparecio tu papá.
- ¿Porqué lo dices? Dijo el secando un poco sus lágrimas.

Ella abrazo a su hijo muy fuerte.

- Mira cuando conoci a tu papá yo estaba con alguien que se llamaba Gael el odiaba a tu papá, porque él juraba que me queria conquistar.
- ¿Y era cierto?
- Al inicio no, después de ciertos eventos si.
- Entiendo.
- Todo lo que tu padre decia era cierto, que lo amaba, que queria mi vida con él.
- Pero... Dijo Angel intrigado.
- Yo tampoco mentía, no lo amaba y queria a Gael, ambos teniamos razón, posiblemente eso se debia porque tu padre entendia mi corazón y por eso sabia lo que sentia incluso antes que yo, y yo vivia mi presente no mentia.

El joven bajó la cabeza, solto lágrimas, su madre le levanto el rostro y seco su mejilla y siguio.

- En este caso, tienes tu la razón porque tu vives el presente y sabes que no mientes.
- ¿Y ella?
- También.
- Si comprendo lo que siente.
- Ves hijo ambos tienen la razón.

La abuela solo veia desde lejos, sabia que ella entendía lo que su hijo paso, sabia lo que ella vivio.

- ¿Cómo supiste que te quedarias con mi padre?
- Bueno eso, pasamos por un momento muy malo.
- ¿La historia de la cicatriz?
- Si...

Hubo una pausa muy grande entre los dos.

- Perderlo me hizo ver que lo amaba.
- ¿Volveron a pasar por eso alguna vez?
- Si te soy honesta, no, no volvio a pasar.

Los tres se quedaron en el parque caminando, mientras la fiesta seguía sin problemas todos hicieron como si no escucharon nada, algunos sabian si hablar del tema, eran amigos de ambos por lo que no querian tomar un bando.

- ¿Cómo crees que acabe esto Jorge?
- No lo sé amigo, confio que Salomé sabra decirle lo que lo guie por el camino.
- Si, yo tambien.