Capítulo cuatro: Hazel Schulz

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Estaba con Ally viendo el partido de hockey sobre césped para cuál claramente, vino a ver a su amor platónico, Oliver. La verdad es que no me gusta este deporte pero me encanta acompañar a mi mejor amiga.
Escucha música, Hazel. Yo sé que no te gusta este deporte ni los deportistas, tranquila. -Río levemente, me acarició la cabeza y volvió a concentrar su mirada en Oliver.
Me puse mis auriculares para mirar el partido y así no escuchar el ruido de las barras del equipo local y visita, eso era lo que más odiaba de los deportes. Hasta que derrepente, el roba corazones de Allison se cayó y quité mis audífonos para escuchar la pelea entre los equipos por la caída del mejor delantero de Portside high y escuchó unas leves risas burlonas atrás mío.
Ahí tienes tu merecido, idiota. -Dijo Vincenzo ocultando su risa burlona con sus largos dedos.
¿Vincenzo? Un minuto, ¿Traes mi pulsera? -Lo miré fulminante y sorprendida.
Agh, hasta que porfin te veo. Costó mucho encontrarte para pasártela, anoche se te cayó. -Se quitó mi pulsera, me la pasó en la mano y desvió la mirada.
¿Por qué te ríes de Oliver? -Lo miré curiosa.
Escuché lo que dijiste.
Porque es gracioso y patético. -Respondió con la mirada perdida.
La verdad es que Vincenzo tiene razón, Oliver es un presumido que ama hablar siempre de sus éxitos y minimiza los éxitos ajenos. Así que es bastante molesto.
Concuerdo contigo, pintor gruñón. -Reí leve.
Oye, por cierto.. ¿Puedo preguntarte algo?
Adelante, estatua. -Me miró con sus ojos miel de una manera profunda.
¿Eres familiar de Oliver Pasquarelli? -Mi voz se quebró un poco, él mantuvo su mirada hacia mí y levantó mi mentón suavemente.
Ese perdedor, es mi hermano menor. -Gruñó y soltó mi mentón.
Eso me dejó impactada, por una parte era normal que el delantero egocéntrico siempre hablase de él mismo ignorando a los demás y siendo siempre el increíble en todo lo que haga pero a la vez me preguntaba ¿Por qué nadie sabía que él era el hermano menor? Más bien,
¿Cómo nadie sabía que tenía un hermano mayor? Vaya, son demasiado diferentes tanto como físicamente y emocionalmente.
¡Hey! ¡Hazel! ¡Ya terminó el partido! -Ally empujó mis hombros.
¡Ay ya! ¡Ya entendí, vámonos! -Dije mientras veo a mi alrededor buscando a Vincenzo pero también se fue.
La mayoría de los estudiantes estaban con el equipo y pues casi toda la preparatoria, estaba el director, profesores, admiradoras de Oliver y por supuesto, Allison.
¿Quieres ir conmigo? -Me preguntó con su dulce sonrisa.
No, prefiero irme a casa. ¡Nos vemos mañana Ally! -Me despedí de ella con nuestro saludo y despedida de amistad.
¡Nos vemos, Hazel!

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