Por la mañana ambos se sentían en un sueño, despertar a lado de la persona que amaban parecía alucinante, después de darse un baño prepararon el desayuno y de lo más tranquilos salieron rumbo a la universidad ― ¿A qué hora terminan tus clases? ― le pregunto mientras caminaban tomados de la mano ―Me gustaría pasar por ti preciosa
―Las clases finalizan a las 11, pero necesito quedarme en el laboratorio para continuar con mi guía ― medito por unos minutos ―Podríamos vernos a las dos de la tarde
― ¡Bien! Te esperaré aquí afuera ― exclamó justo cuando llegaron al campus, después de un par de besos se despidieron y ella ingreso, Sesshomaru la observó por unos minutos hasta que se perdió completamente.
Ambos sabían que su pasado los alcanzaría en algún momento por lo que debían ser sinceros sin embargo el miedo de arruinar ese lindo sentimiento que comenzaba a surgir en ellos los atormentaba.
El día transcurrió de lo más tranquilo, al finalizar sus clases se dirigió al laboratorio, estaba muy concentrada cuando recibió un mensaje de Sesshomaru "¿Aún no terminas, bonita?" el cual la hizo notar la hora, pasaba de las dos de la tarde, rápidamente dio respuesta "Ya salgo, dame dos minutos" guardo sus pertenencias y salió casi corriendo, al vislumbrarlo en la acera le sonrió apenada ―Lo siento... se me ha ido el tiempo
―No te preocupes preciosa, no quería presionarte
―Al contrario, gracias por mandarme ese mensajito ― sin pedir permiso la rodeo por la cintura y aprisiono sus labios en un apasionado beso que duro algunos segundos ―Te echaba de menos
―Y yo a ti ― correspondió con un segundo beso ― ¿Qué tal tu día?
―Bien, he cerrado un contrato importante el día de hoy
―Eso es increíble, felicidades guapo
―Gracias bonita ¿Tú cómo estás?
―Bastante bien, he avanzado considerablemente en las guías que debo entregar
―Eso merece una celebración ¿Vamos a comer?
―Claro ― confirmo mientras subía al auto, Sesshomaru la imitó y comenzó a conducir mientras le contaba a detalle aquella firma de contrato, ella lo escuchaba atentamente y disfrutaba ver esa radiante sonrisa de la cual se estaba volviendo adicta.
Mientras esperaban la luz verde en un semáforo Rin pregunto ― ¿A dónde iremos amor?
Él sin dar respuesta se perdió por completo en esos enormes ojos castaños que lo miraban expectantes ― ¿Pasa algo? ― dudo un poco
―No... es solo que es maravilloso escucharte decirme amor... Cuando te vi sentada en la silla de tu padre no imagine cuán importante serías en mi vida ― confeso mientras le daba un beso en el dorso de su muñeca
― ¡Cierto! Eras un egocéntrico ― no pudo argumentar nada en contra de esa acusación puesto que era verdad ―Lo era, pero no más ― confirmo entre risas, al tener luz verde continuaron su camino hasta un restaurante que investigo y a su parecer era prometedor.
Los días transcurrieron, la convivencia era con más familiaridad, Sesshomaru tomó como rutina el acompañarla hasta la universidad y recogerla por la tarde, Rin se sentía cómoda con aquella acción, aunque no podía negar que parecía colegiala a sus veintitantos años.
Viernes por la noche regresaban de cenar, durante el camino a casa acordaron que era momento de hablar sobre aquello que tanto escondían, entraron al departamento en silencio, Sesshomaru camino directo hasta la barra de la cocina en donde se encontraba el alcohol y se sirvió un Whisky ― ¿Gustas algo? ― pregunto al notar la seriedad reflejada en su rostro
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Al final del Amor
Fanfiction¡Somos los indicados en el momento incorrecto! A menudo solemos conocer personas que por un motivo u otro llegamos a perder, ya sea de manera permanente o por algún tiempo, de cierto modo esta acción es buena pues siempre nos volveremos a cruzar con...