NOCHES DE ENSUEÑO || Katsuki Bakugo x Tú ||

Capítulo 74

_____ abre los ojos lentamente al sentir el dedo de Katsuki limpiando una lágrima, notó su mano agarrando la de él frente a su rostro pero solo apretó un poco más y suspiró.

- Katsuki... - Murmura.

- ¿Qué quieres, extra? - Pregunta mientras la hace acostarse bien de nuevo y coloca el trapo en su frente.

- ¿Es verdad... ? -

- ¿Ah? -

- ¿Que yo... te gusto? - Lo suelta en un suspiro adormilado, tal vez no era consciente de lo que decía pero aún así Katsuki se sorprendió.

- No sé de qué hablas, extra, mejor cállate y vuelve a dormir -

- Porque tú a mi sí... -

Katsuki abre los ojos de par en par al igual que abre ligeramente la boca por la sorpresa, realmente no era sorpresa sus sentimientos, pero que lo admitiera sí que lo era. En ambos era algo muy obvio lo que sentían por el otro, un sentimiento mutuo y perfectamente claro, pero ambos eran muy orgullosos para admitirlo, hasta ahora...

- Me gustas, Katsuki Bakugo... y mucho -

Katsuki solo se mantuvo callado sin saber que decir pero allí no terminó.

- Pero... aunque tu sientas lo mismo... no sé si siga así después... -

- ¿Ah? ¿De qué hablas? -

- Si yo... te dijera que... maté a dos personas... ¿Me querrías igual? - Aquella confesión sorprendió mucho más al rubio.

En esta situación, menos sabría que decir, por lo que volvió a callar y ella a lagrimear.

- Yo... quiero contarte, para no guardarte secretos, pero... me asusta... tengo miedo de lo que pienses de mi después de contarlo... -

"Porque eso ya no podría soportarlo..."

- Tsk, no debes tener miedo, idiota. Ya tengo una imagen de ti y aunque me cuentes cosas horribles de tu pasado... eso ya es pasado, así que no. Si me cuentas que mataste a dos personas en el pasado, no dejaré de quererte, extra -

Aparta la mirada por su confesión pero ella acerca su mano que aún seguía agarrando hasta su pecho y suspira aliviada.

- Menos mal... - Dice pero entonces hace una mueca de querer llorar de nuevo, pero se aguanta - Tenía cuatro años, aún no había desarrollado mi don... mi padre llegó borracho y drogado, no era algo nuevo... peleó con mi madre, me despertaron por algo que rompieron cuando la golpeó -

Katsuki solo la mira atento a cada palabra que salía de su boca.

- Quise ayudar a mi madre... pero claro... ¿Qué podía hacer una simple niña? Estuvo por lanzarme para apartarme pero... mi don se manifestó, yo no quería decir la orden, pero fue como si saliera sola... y lo dije... "Mátate"... fue mi primera orden, sacó la pistola que llevaba consigo y... se disparó en la cabeza... -

La escena se repitió en su mente como un recuerdo fugaz pero igual a cada noche con la misma pesadilla. Ella siguió hablando adormilada y sin ser consciente de todo lo que estaba confesando.

- Mi madre se molestó conmigo, ella lo amaba... aún recuerdo las palabras que me dijo ese día... "Maldita niña ¿Pero qué hiciste?" "Eres un monstruo. Mataste a tu padre. Esto es tu maldita culpa" -

Katsuki tensó la mandíbula al escucharla, en su mente estaba maldiciendo a todo y preguntándose como su propia madre pudo decirle eso siendo que ella solo la quiso defender.

- Volví a hablar sin controlarme yo misma... e hice que se matara con la misma pistola... los vecinos habían llamado a la policía. Ellos no me hicieron mucho caso, solo escucharon lo que los vecinos dijeron y todos concordaron con que fue mi padre el responsable de todo... no dije nada, dejé que me llevaran a un orfanato y viví allí varios años... -

Ella se quedó en silencio un momento pero siguió.

- Allí fue donde me molestaron con mi peso... mi apariencia... pero fue peor cuando descubrieron mi don, uno de ellos me apodó "Empress" y no como algo lindo... me creían una dictadora, decían rumores falsos... y se amenazaban entre ellos con que si no me hacían caso iba a hacerles cosas malas -

"Mocosos bastardos..." Fue el pensamiento de Katsuki quien seguía manteniéndose en silencio, escuchando pero de vez en cuando remojando el trapo.

- Una familia de acogida me llevó con ellos... y cuando pensé que todo estaría bien, me devolvieron, no sé porqué, ni tampoco porque me dejaron dinero solo a mi... pero así fue y volví a quedarme unos días en el orfanato hasta que... decidí escapar de allí... fui a la zona donde ni los héroes ni policías van... me asenté en un departamento miserable, con vecinos de mierda... a veces comía, otras no... solo para guardar el dinero -

Resoplé adormilada casi desmayándose de nuevo, pero entonces se mantuvo despierta.

- Hasta que vino un músico que fue mi vecino... me cuidó y enseñó de música por un tiempo, hasta hace dos años... le robaron todo, se molestó y se fue para siempre, pero él también me dejó dinero... supongo que se encariñó pero no lo suficiente para llevarme con él, como sea... y finalmente entré aquí y todo mejoró... bueno casi... los villanos son molestos -