Amanecer

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Después de meses de planear, comprar y agendar todo Tiffany Y Nica estaban tan emocionadas por que el día en que se jurarían amor eterno estaba tan cerca.
Tiffany era más consiente de lo malo que había hecho al asesinar a tantas personas inocentes, el dolor que le causaba a las Familias de aquellas víctimas, pero Nica la hizo cambiar con solo su mirada y su cariño. Estaba perdidamente enamorada de ella no era lo mismo que con charles, el era cruel, frío y  egoista, tan sólo buscaba la manera de asesinar con su ayuda, era un estúpido ser humano, la ultima vez que lo vio lo hizo pedazos al aver intentado arrebatarle a su mujer quizá no lo ha exterminado para siempre pero estába segura que no lo vería en un buen largo tiempo, tan solo esperaba que no arruinara lo que más había soñado, casarse con la persona que más amaba, y tener una linda familia.

-¿Estas bien amor?. Decía Nica mientras veía a Tiff tan perdida mientras comía pequeños bocados de fruta.

-Sí, no te preocupes linda. Dijo mientras sonreía.

-Ya falta cada vez menos para tenerte a mi lado como mi esposa. Dijo Nica mientras tomaba su mejilla y la acercaba a su rosotro para besarla con ternura.

-Eres muy cursi lo sabías. Dijo Tiffany mientras soltó una pequeña risa al ver la cara roja de Nica por el pequeño beso.

-jajaja yo no soy cursi, Tu si linda ¿recuerdas la semana pasada que me hablabas como si fuera la misma reina?

-Pero.... Dijo Tiffany haciendo un pequeño puchero mientras decía eso.

-Y la rosa que me triste, como me llenabas de besos antes de dormir...Dijo interrumpiendo a Tiff y hablando en un tono burlon pero lindo.

Estuvieron platicando toda la mañana era algo tan común en ellas tener un tema de conversación, salían a pasear al parque, Tiffany en ocasiones tenía sesiones de fotos y estaba comenzando a recuperar la carrera de Jennifer Tilly estaba practicando para poder hacer sus papeles, no eran tan grandes como los que hacía Jennifer pero con lo que le pagaban podía comprar cosas para su prometida, mantener la mansion, comprar regalos para los niños. Su vida era mucho mejor desde que estaba con los niños y Nica.

Eran las 3:30 de la tarde los niños volvían a casa después del colegio.

-Alice... ¿Te gustaría salir otro día? Preguntaba Glenda a Alice mientras entraban a la sala.

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