.01.

5.9K 290 29
                                    

De pequeña había sido una niña dulce, alegre e hiperactiva, la princesa de la casa, mi madre me consentía y adoraba, pero no sucedía lo mismo con mi hermano, por alguna razón que no comprendía y aún sigo sin comprender, mi madre lo culpaba por los contantes maltratos del hombre que nos había dado la vida; esa mujer odiaba a mi hermano y mi padre nos odiaba a todos, ese hombre era un abusivo, golpeaba a mi madre y con el tiempo también a mi hermano, y si no hubiera sido por él que me protegía recibiendo sus golpizas, también lo hubiera hecho conmigo...

Esa situación me estresaba, sobre todo porque dependía de que mi hermano, quien era un año menor que yo, me defendiera, y solo porque mi estúpido cuerpo no crecía, él era mucho más alto y fuerte, por lo que insistía en que él podía soportar los golpes de nuestro padre y que me protegería de todo siempre que estuviera conmigo.

Tenía la esperanza que cuando creciéramos las cosas mejorarían para ambos, pero no fue así, a medida que el tiempo iba pasando los maltratos crecían, por lo que mi personalidad y actitud comenzaron a cambiar, amaba a mi hermano, él siempre había estado para mí y yo quería estarlo para él, así que comencé a frecuentar un gimnasio dónde conocí a gente realmente buena que al ver la situación en la que me encontraba me ayudaron a su manera, me enseñaron a defenderme y poder defender a mi hermano también

Por suerte al estar entrando en la adolescencia mi cuerpo comenzó a cambiar y por fin comenzaba a ganar un poco de altura también, y aunque seguía siendo bastante baja, gracias a mis nuevos entrenadores comencé a tomar ventaja de ello a la hora de pelear, lo que me ayudaba bastante en casa.

Si bien siempre habíamos sido unidos con mi hermano, a partir de nuestros doce años nos volvimos inseparables, conocí a sus amigos y me volví uno más de ellos, lo que enfureció aún más a nuestros padres, pero no nos importaba, éramos felices juntos y jamás nos podrían separar...

¡Mikey!- corrí hacia el rubio feliz- ¡Derribé a Tora con una patada!

¿En verdad?- miró al recién mencionado quién se acercaba sobando su cabeza junto a Baji que reía a carcajadas a su lado- ¡Eso es genial!

No es genial, ¿Por qué demonios le enseñaste eso? Duele y todo es tu maldita culpa- Kazutora lo miró molesto

Deja de quejarte, fue divertido verlo- afirmó su acompañante- fue como si un pequeño gatito derribara a un tigre gigante

¡Oye!- me quejé- algún día creceré y tendrás que dejar de llamarme así

Ya lo veremos...- se burló

No me importa- desvié la mirada- Shin me felicitó por haber mejorado y Wakasa dijo que me enseñaría movimientos nuevos

Estoy orgulloso de ti- el rubio revolvió mi cabello mientras sonreía

Miré a Mikey con fascinación, adoraba a ese chico desde el momento en que me había salvado de unos sujetos años atrás, y a pesar del tiempo que había pasado, la única diferencia era que mi admiración había crecido junto al afecto hacia él

¿Están listos? Iremos al santuario- dijo Draken llegando a donde estábamos

¡Sí!- grité feliz

Tu iras con Mitsuya hoy- afirmó Mikey- quiero ir con Baji

Me lo quedé mirando fijamente, Baji era quien me llevaba siempre con él en su motocicleta, y aunque adoraba a Mitsuya no se sentía igual

Ohh de acuerdo- asentí lentamente para caminar hacia el chico

Súbete- me sonrió- y sujétate bien de mí, ¿Si?

Si- lo obedecí para rodear su cintura con mis manos- ¿Sucedió algo? Es raro que Mikey no vaya con Draken, ¿Están peleados?

| Good times | Bonten | +18 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora