Ella quiere mantener su promesa, quiere estar a su lado por siempre, pero la vida continua poniéndole obstáculos y cada vez más difíciles de superar ¿Podrá cumplir con su palabra?
(No adaptar ni copiar, ya sea completa o parcialmente)
Comenzada: 03...
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Nota importante: Este capítulo está narrado desde el punto de vista de Koko😌
Ahora si, comencemos...
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Miré a mi alrededor observando con atención todo el lugar, las paredes simples de color pastel, los asientos de baja calidad y pasados de moda junto a las mesas que incluso se movían un poco, jamás hubiera entrado a un lugar así en mi vida, no había nada que me convenciera de hacerlo, bueno, solo una persona ers capaz de lograrlo
Desvié la mirada hacia la azabache que se encontraba frente a mí acariciando un pequeño gato blanco que se había dormido entre sus pechos, la sonrisa que tenía y como sus ojos brillaban hacían que estar en ese lugar valiera la pena
Una de las meseras puso nuestro pedido frente a nosotros y vi a Mina clavar sus ojos en mí unos segundos
Amo este lugar, gracias por traerme- estiró su mano hacia mí, la cual tomé sin dudarlo entrelazando nuestros dedos
Te llevaría a recorrer el mundo entero si me lo pides- afirmé
Y era la verdad, la llevaría a cualquier lugar que quisiera, y por ello estábamos en ese catcafé, jamás hubiera asistido allí por voluntad propia, pero por ella haría lo que fuera
Sabes, jamás sentí tantos celos por un simple gato- suspiré- está robando toda tu atención en nuestra cita
Lo siento, no puedo dejar de pensar que este gato se parece a Mikey- alejó al gato de su pecho
Si, tiene una obsesión con dormir hundido entre tus pechos- negué rodando los ojos- es molesto
Awww, no es molesto en realidad es adorable- apretó mi mano- desde pequeños dormíamos así y no tenía pechos en esa época, creo que solo es costumbre
No importa, es molesto, yo también quiero- me miró levemente sonrojada- tu si que eres adorable
Cállate- desvió la mirada
Comimos mientras hablábamos de cosas sin sentido, era bueno pasar tiempo solo nosotros dos, me relajaba estar a su lado y me hacía olvidar de todo lo que nos rodeaba
