😜°○𝙲𝙰𝙿 7: 𝙳𝚒́𝙰 𝙳𝙴 𝙷𝙴𝚁𝙼𝙰𝙽𝙰𝚂○°😜

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Pasan las horas, llaman a la puerta. -Abro yo!! -bajas corriendo y abres la puerta.
-Hola chicos. -te lanzas a sus brazos.
-Joder que contenta te has puesto. -dice Pony.
-Hola T/N. -dice Johnny al mismo tiempo.
-Pasad.
-Hola.
-Hola Holly. -saludan los dos al unísono.
Subís a tu cuarto.
-Que bonito es tu cuarto.
-Gracias. - os sentáis en tu cama, menos pony que se sienta en la silla de tu escritorio.
-¿Qué era lo de Two-bit?
-A si, dentro de dos días hay una reunión en casa de Dallas.
-¿Una reunión?
-Nosotros y las novias de Steve y Soda.
-Y Two-bit quiere que vengas. Bueno, a ver, todos queremos que vengas, pero yo pensaba que querrías ir más despacio.
-Si no quieres venir no pasa nada.
-En realidad si me vendría bien hacer amigas. Está bien, iré.
-Genial.
-¿Queréis escuchar algo de música? -sacas unos discos de vinilo que tenías guardados del tocadiscos de tu padre.
-A ver que tienes. -dice Johnny acercándose a los discos.
-Solo espero que no sean baladas románticas. -dice Pony imitando a su amigo.
-¿De verdad crees que soy del tipo al que le gustan las canciones cursis?
-¿No lo eres? -le das un pequeño golpe en el brazo.
-Ay! Eso ha dolido.
-Mira, Kiss.
-Mola.

Pones el disco y empezáis a cantar y bailar por toda la habitación. Cuando termina la canción os tiráis los tres en la cama, cansados.
-Oye pues bailas bien. -te dice Pony. -Deberías haber aceptado la propuesta de Cherry Valance sobre el equipo de animadoras.
-¿Te ofrecieron un puesto en el equipo de animadoras?
-Me ofrecieron una prueba, pero las animadoras llaman mucho la atención, y eso no me va.
-Oh venga ya, esas cosas no se rechazan, son oportunidades únicas.
-Presentate tú la próxima vez, la falda del uniforme te tiene que quedar de maravilla. -Pony y tú empezáis a reír.
-Que graciosos. -Johnny se levanta y empieza a buscar entre los vinilos.
-A ti te gusta Cherry, verdad?
-¿Cómo lo sabes?
-Oh venga Pony, he visto como la miras, y hablas muy bien de ella.
-¿Cómo es la tal Cherry?
-Pues es delgada, de estatura media, lider del equipo de animadoras, guapa, lista y muy pelirroja. -dices.
-¿En serio? Pues que Dallas no la vea, le encanta las pelirrojas.
Pony lo mira mal.
-A todos os gustan las pelirrojas. -dices.
-Menos a Two-bit.
-Él las prefiere rubias.
-Y si tiene cerveza mejor.
-Si, las rubias también os encantan. -dices.
-No ha todos.
-Claro, claro. -te ríes.
-Deja de reirte.
Pony empieza a hacerte cosquillas, luego Johnny se tira encima de vosotros y empieza a hacerte cosquillas también. -Parad ya. -les pides entre risas.

Luego de un rato los chicos se marchan, pero antes le pedís permiso a tu padre para que te deje ir a la casa de Dallas, afortunadamente tu padre dijo que si, no fue fácil, pero el esfuerzo dio sus frutos.

Tu padre solo tenía dos días libres en su trabajo, pasado mañana tendría que volver al trabajo.

Llega el día. Te pones una falda blanca un poco ajustada y un camisa a cuadros.

Estabas muy nerviosa, pero ibas a estar con Pony y Johnny, eso te relajaba. Los chicos llegan a tu puerta.
-Tened cuidado.
-Tranquila Laura.
-Te la cuidaremos.
-Más os vale. -dice con una sonrisa amistosa. -Pasaoslo bien. -os vais.

Llegáis a la casa de Dallas.
-¿Nerviosa?
-Bastante, cómo son Sandy y Evie?
-Tranquila, te caerán bien, son muy simpáticas.
Johnny llama a la puerta.
Os abre Dallas. -Hola, pero si has venido T/N.
-Me sorprendo hasta yo.
Dallas ríe. -Pasad. -os lleva con los demás.
-Hola chicos. -saluda Pony.
-Hola. -dicen todos casi a la vez.
-T/N -te llama Steve. -Mira te presento a mi novia, ...-la chica de cabello negro y largo lo interrumpe
-Hola soy Evie, encantada. -te abraza.
-Ho- hola.
-Hola, yo soy Sandy. -dice una chica de cabello rubio. Te abraza.
-Encantada.
-Nosotras si que estamos encantadas. -dice Evie. -Ya era hora de que otra chica entrara en el grupo. -continua.
-Sí, los chicos ya nos estaban cansando.
-Oye. -dice Soda.
Las tres reís.
-Bueno. -dice Dallas. -¿Quieres jugar al billar? -te pregunta.
-No sé jugar.
-¿Qué?
-¿Cómo?
Dicen todos los chicos sorprendidos.
-No sabes donde te has metido cariño. -dice Evie.
-Eso no puede ser, ven aquí, te haré de maestro. -dice Two-bit agarrando un taco.

Durante la siguiente media hora, Two-bit estuvo enseñandote a jugar, y luego pusiste en práctica lo que te enseñó con él. Pasaste un rato muy divertido.
Luego las chicas se sentaron contigo en un sofá.
-Te gusta la ciudad T/N?
-Está bien, no es para nada a lo que estoy acostumbrada, aunque no sé si eso es bueno o malo.
-Me sorprendió mucho cuando Pony dijo que había hecho una amiga en la escuela. Normalmente la gente no se le acerca por ser un greaser.
-Eso es algo que no hay en el pueblo, esas diferencias.
-Por eso mucha gente se quiere ir de la ciudad al pueblo.
-La gente quiere ir al pueblo porque no viven en uno. -dices.
-Lo mismo con los del pueblo que quieren vivir en la ciudad.
-Queremos lo que no tenemos.
-Exacto.
-Ahy T/N, eres encantadora.
-Gracias.
-Oye, tenemos que quedar algún día y hacer cosas de chicas.
-Eso sería genial.
-Toma. -Evie te da un papel con unos números. -Este es mi número de teléfono.
Guardas el papel en el bolsillo.

Pasas un rato muy agradable con los chicos. Cuando volviste a casa le contaste a tu padre que recién llegó del trabajo. Últimamente estaba siendo demasiado permisivo.
-¿Por qué me dejas salir tanto?
-Para una vez que haces amigos no voy a ser yo quien te niegue pasar tiempo con ellos, pero no te acostumbres. -te dice con una sonrisa.
Lo abrazas. -Gracias.
-De nada mi vida.
Os separáis.
-¿Te gusta la ciudad?
-Contra todo pronóstico, me está gustando bastante.
-Me alegro. -te acaricia la mejilla.

Subes las escaleras hacia tu habitación cuando te llama Laura.
-Oye T/N.
-¿Sí?
-Últimamente no paras en casa.
-Ah bueno, estoy haciendo amigos.
Te sonríe. -Deja me acabar, y yo estoy muy cansada de la universidad, y si mañana nos tomamos un día para las dos? Podemos salir y conocer la ciudad, podríamos comer fuera.
-Eso sería estupendo, hace mucho que no hacemos eso.
-Pues decidido.

A la mañana siguiente te duchas temprano y te vistes con una camisa que mezcla tonos de azul, una falda vaquera y unos deportes blancos con plataforma. Te sueltas el pelo, dejando caer tu pelo por los hombros.
Laura entra a tu habitación, vestida con una falda larga y una camiseta ajustada que resaltaba sus curvas.
No puedes negarlo, Laura era una de las chicas más hermosas del mundo, no puedes evitar tener celos de ella, pero en el buen sentido, celos de su belleza y de su confianza.

-Estás guapísima.
-Gracias T/N, tú también, pero puedes hacerlo mejor.
-¿Eh?
-Ven aquí. -te sienta en tu escritorio y va a por su maquillaje. Le pediste algo natural, y así lo hizo, te hizo el delineado y un pequeño brillo de labios que resaltaba el color rosa natural de los tuyos.
-¿Puedo abrir los ojos ya?
-No. Levanta. -te agarra de los hombros y te levanta de la silla. Sientes como sus manos desatan algunos botones de tu camisa. Te lleva hasta el espejo de pie.
-Ahora, abre los ojos.
Le haces caso. Cuando te miras en el espejo casi no reconoces a la chica que estaba frente el espejo.
-¿Esa soy yo?
-Sí, estás preciosa.
-¿De verdad?
-Deja de hacer preguntas tontas. Vámonos.

Nathaniel se quedó solo con los gemelos y Holly a regañadientes, y la más pequeña se queja de que no os la lleváis. Tú y Laura paseais por la ciudad, veis una cafetería y decidis entrar. Cuando pedís empezáis a hablar, como antes.

-Dios, hacía mucho que no salíamos así, tú y yo solas, hablando de algo que no sea la familia.
-Sí, no la hacíamos desde que mamá... -te quedas callada.
-Sí. -te mira triste. Y recuerdas...

➪𝙷𝚊𝚌𝚎 2 𝚊𝚗̃𝚘 𝚊𝚝𝚛𝚊́𝚜...

Estabas desayunando con Laura en una cafetería del pueblo, estábais hablando del novio de Laura.
-Enserio has dejado Lucas?
-No aguantaba más, era demasiado... Intenso para mi gusto.
-No te entiendo, tenías un novio que estaba loco por ti y lo dejas.
-Lo entenderás cuando tengas novio, pero no tengas prisa, o a papá le dará un infarto. -las dos reís.
El teléfono de Laura empieza a sonar.
-¿Lucas otra vez?
-No, papá. -coge la llamada. -Di me papá. No, no la hemos visto, hemos salido directamente esta mañana.
-¿Qué pasa?
-Que mamá no está en casa dice.
-No habrá ido a la compra?
-Ni idea. -vuelve a hablar con Oliver. -A ver papá, tranquiliza te. Vale.- cuelga.
-¿Qué?
-Vamos a buscarla al bar.

Os levantáis y os vais con el corazón en la garganta.

𝚄𝚗𝚊 𝚛𝚒𝚜𝚊 𝚝𝚞𝚢𝚊 𝚟𝚊𝚕𝚎 𝚖𝚊́𝚜 𝚚𝚞𝚎 𝚖𝚒𝚕 𝚙𝚊𝚕𝚊𝚋𝚛𝚊𝚜 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora