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Narrador

Después de esa noche en el restaurante con Sirzechs, Issei se encontraba en su habitación observando por internet la pelea de Sendo contra Ippo Makunouchi, siendo Sendo el campeón en ese momento.

Fue muy emocionante poder ver ese espectáculo tan increíble, tanto que deseaba poder conocerlo. ¿Será posible ir hasta Osaka para poder coincidir con él?

-Si pudiera tener un equipo como el de Rias... propio, sin dudas me encantaría tenerte como mi aliado -dijo Issei para sí mismo.

El video continuó mostrando cada vez más intensidad, la misma que sentía Issei al observar esos intercambios de golpes entre los dos boxeadores.

Poco después de terminar de ver toda la pelea completa y con un sentimiento de frustración al ver a su nuevo ídolo perder contra el mismo oponente dos veces, era algo que Issei había experimentado pocas veces.

Decidió irse a preparar las cosas para el siguiente día de escuela e irse a dormir tan pronto terminara. Sentía un poco de curiosidad sobre la caja elegante que le dio él ¿qué podrá ser?.

No resistió su curiosidad y lo abrió de manera cuidadosa. Lo primero que encontró fue una carta que leyó con mucha atención, cada vez que avanzaba entendía de lo que se trataba lo que Sirzechs le había obsequiado.

Según sus pequeñas clases con Rias sobre la cultura de los demonios, cada una de las familias restantes de las 72 originales tienen un juego de estos que los ayuda a aumentar sus números para evitar la extinción. Aunque era claro que solo los demonios de clase alta las obtenían.
...
Al día siguiente en la escuela, no pasó nada muy interesante al respecto con las clases. Lo que le era interesante a Issei era el cuarto cerrado en el edificio que usaban como club, ¿por qué se encuentra cerrada? No tiene la más mínima idea de por qué, pero algún día le preguntaría a Rias.

Estando una vez más en la sala del club de investigación de lo oculto. Issei se fue a sentar directo al sofá doble y se recostó hasta que los demás chicos llegaran.

Akeno fue la siguiente en llegar al lugar, ella se quedó un poco asombrada. ¿Cómo fue que Issei llegó más rápido que ella sí salieron al mismo tiempo?

-Ara Ara, Issei-san -dijo Akeno viendo a Issei recostado-. ¿Cómo te encuentras?

Issei solo alzó el pulgar en señal de que estaba bien. Y solo se movió un poco para estar en una posición más cómoda de lo que estaba al inicio.

-Voy a preparar un poco de té -dijo Akeno con una pequeña sonrisa.

-Akeno-san, ¿podrías preparar algo para mi dolor de cabeza? -preguntaba Issei, aun acostado.

Akeno sonrió un poco y respondió con "si" ante la petición del pelirrojo. La chica al poco tiempo, colocó en la mesa de centro una taza de té junto con una pequeña pastilla para el dolor de cabeza.

Issei cambió su posición para levantarse, tomó la taza junto con la pastilla del lugar donde se encontraban para consumirlos.

-Gracias, Akeno -dijo Issei con una sonrisa-, es un té delicioso.

-Muchas gracias Issei-san -sonrió la pelinegra.

Poco tiempo después, Rias entró a la sala del club y pudo ver a su reina observando dormir a Issei.

Le pareció curioso así que se le unió a la actividad que estaba desempeñando Akeno, la chica le sonrió y le hizo una señal para que se acercara un poco más.

-¿Qué sucede? -preguntaba Rias a forma de susurro.

-Está un poco cansado, nunca lo había visto así -dijo Akeno mientras se levantaba.

HighSchool DxD: El Heredero OlvidadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora