Llevan minutos hablando, los nervios están comenzando a ganarme, parecen ser horas las que paso aquí sentada mientras Dylan me lanza miradas de preocupación e interrogación.
— Disculpen por la espera de tanto tiempo, nos han enviado el análisis forense de la señora Sara Rodríguez. Su causa de fallecimiento se debe a una sobredosis de cloroformo, su cuerpo fue encontrado en el patio adosado de una casa abandonada a las afueras de Marsella.
No puede ser...ahora si que estoy perdida, había matado a alguien, Dios mío ¿qué he hecho?
Nuestro abogado retornó a su asiento junto con Dylan, desde mi posición solo podía ver como el rostro de Dylan se mostraba furioso y desesperado.
— ¿Señorita Harper podría explicar con lujo de detalle como realizaron el secuestro de la señora Rodríguez?
— Si — de alguna manera debo salir de esta — Fue nuestro primer trabajo, Thiago nos entregó una carpeta repleta de información sobre la señora Rodríguez, se nos mandó a dormirla y entregarla. Para ello, adaptamos la vestimenta de Dylan a la de una persona que frecuentaba los mismos lugares y que pudiese llamarle la atención, esa misma semana nos acercamos a ella. Mientras Dylan se encargaba de atraerla y alejarla de sus amigas, yo..— me cuesta que las palabras logren salir — yo suministraba el cloroformo en su bebida, y tras minutos de espera la sacamos por la puerta trasera para que la gente y sus amigas no la vieran. Al salir vinieron los hombres de Thiago y se la llevaron.
— ¿Usted tenía algún mínimo de conocimiento de química para saber qué cantidad debía suministrar?
— No — no podía decir que Dylan fue quien racionó el cloroformo.
— Señoría, han acabado mis preguntas para la señorita Harper.
El guardia de seguridad me ordena levantarme para volver a mi asiento junto a mi abogado.
— Habiendo concluido los alegatos, quiero preguntar si tienen algo más que agregar — hace una pausa en espera de alguna respuesta — Las pruebas de la policía, el análisis forense y las declaraciones fueron suficientes y contundentes para acreditar el homicidio, por lo que se condena a la señorita Grace Harper Prego a 20 años de prisión. Se da por terminada esta audiencia.
Todos en la sala se levantan y comienzan a abandonar la sala. Yo no puedo moverme, todo desaparece a mi alrededor, 20 años de prisión...
Ambos guardias de seguridad me agarran de los brazos para levantarme y en ese momento nuestro abogado los interrumpe mostrando un permiso de algo que no llego a oír.
Oigo la voz de Alex enfadado pidiendo que le dejen pasar y minutos después a James balanceándome pidiendo que le conteste. Quiero pero no puedo, sigo sin poder asimilar todo lo que ha sucedido en cuestión de minutos. Lo único que puedo llegar a notar es como Dylan y James me ayudan a levantarme y me dirigen hacia el coche, subimos y todo el transcurso del viaje la paso mirando por la ventana "Grace esto solo puede tener dos finales, la muerte o la cárcel".
La salida del coche y la llegada hasta casa es lo mismo, nadie me pregunta nada y yo me mantengo callada. Los primeros que llegamos a casa fuimos Alice, Dylan, James, mi madre y yo.
Ya estando todos en casa nos reunimos en el salón, una parte intenta tranquilizarme y ayudarme mientras que la otra parte opta por no decir nada ante la duda de no saber si mantenerse callados.
Mi madre me agarra de la mano para que la mire.
— Cariño, perdóname — dice besándome el dorso de la mano — por culpa mía te encuentras aquí, yo confío en ti y sé que no mataste a aquella mujer. Haré todo lo que pueda aunque tenga que vender todas las cosas pero pienso sacarte de allí sea como sea.
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HASTA QUE ME RECUERDES #1
Teen FictionMe presento, soy Grace Harper Mi vida podría describirse como un torbellino de emociones y circunstancias durante mi adolescencia y juventud, desde un viaje hasta un grave delito. Las consecuencias de una mala decisión. Pero no quiero hablar demás...