12 de abril, 2021.
Buenos Aires, Argentina.Niccóla Ribba.
- ¿Ya le hablaste? - niego rápidamente con mi cabeza ante la pregunta de Mica, haciendo que la castaña suspire cansada. - ¿Y qué esperás?
Tener valentía, pienso, pero no respondo nada, solo me meto un bizcochito a la boca. Son de grasa y no puedo parar de comerlos, esta mierda es muy adictiva.
- Uh, 'ta re lavado esto ya. - murmuro re en la mía y agarro el mate para levantarme a tirar la yerba y ponerle nueva. Una vez lo tuve listo, vuelvo a la mesada del departamento de Mica y me la encuentro a ella con mi teléfono en sus manos. - ¿Qué hacés? - no sé si mi voz tiene más confusión o pánico en ella.
- Andá a cambiarte que ya te llamo el uber, vas a ir a hablar con Julián. - deja mi teléfono en la mesada con total tranquilidad bajo mi mirada que, estoy segurísima, transmite claramente un "¡¿QUÉ MIERDA?!". Agarra el mate y le echa agua. - No me mirés así y apurá que en diez llega el auto, eh.
Agarro rápido mi teléfono para abrir WhatsApp, una parte de mi quiere creer que Micaela no hizo esto, pero esa parte queda con cara de payaso cuando entro al chat con el nueve de River.
Miro a mi amiga realmente indignada.
- Te odio, puta. - murmuro.
Ella hace un ademán. - Puedo vivir con eso, pero el chico realmente necesita una explicación, ¿no creés? - habla con una de sus cejas enarcadas, yo le quito el mate para chupar la bombilla una última vez. - No se cansa de ser tan bueno con vos, no podés simplemente ghostearlo y ya, eso sería muy de basura y vos no sos eso.
No le contesto nada porque sé que tiene razón. Julián no hizo más que demostrarme respeto y cariño desde que nos conocimos, es excelente conmigo y mi familia (hermanos y primos, porque a mí viejo no lo conoce y mi vieja... bueno, ya conocemos la situación). Osea, hasta se bancó que lo meta en mi quilombo con mi mamá fingiendo ser mi novio, incluso alguna que otra noche cayó con helado a lo de Elena cuando yo le contaba que no podía dormir por alguna discusión que tuve con mi vieja.
Y por todo eso sé que no merece el ghosteo, si fuese un pibe equis que solo demostró querer coger, vaya y pase si lo ghosteo. Pero con Julián no puedo seguir haciéndolo, no cuando el hijo de su puta madre me importa demasiado.
Le saco la lengua a Micaela antes de levantarme y correr hacia su pieza. Le grito que le voy a sacar ropa porque solo tengo el jean y la camiseta que usé ayer para ir al partido, y hoy está un poco fresco así que le saco una polera y, por las dudas, una camperita de algodón.
- Chau, suerte. Contame después cómo te va. - me dice Mica cuando llego a la puerta de su departamento, a la cual tiene una buena vista desde la silla de la cocina donde está sentada.
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PERDAMONO' • Julián Álvarez
Teen Fiction¿Él? Julián Álvarez, figura de River Plate y jugador de la Selección Argentina de Fútbol. Todo empezó con una notificación en mi celular: 𝗷𝘂𝗹𝗶𝗮𝗮𝗻𝗮𝗹𝘃𝗮𝗿𝗲𝘇 𝘀𝗼𝗹𝗶𝗰𝗶𝘁𝗼́ 𝘀𝗲𝗴𝘂𝗶𝗿𝘁𝗲. Publicada el 29 nov. 2021.