09.

6.8K 448 145
                                    

10 de abril, 2021.

Niccóla Ribba.

— ¿Vienen a verlas? — Mica nos mira mientras se pone sus rodilleras.

— A mí no, mis viejos son lo más anti deporte que existe. — se ríe Juliana ya parada en la puerta del vestuario, esperándonos a nosotras.

— Yo invité a todos, quién viene y quién no la verdad no sé. — me acomodo bien la colita que tengo en el pelo y la ajusto bien, agarro mi buzo para atarlo sobre mis hombros. Hace un poco de calor y no pienso ponérmelo hasta que comience el partido.

— Seguro vienen todos y hasta con redoblantes, así de intensos son los Ribba. — Sofía comenta y todas asentimos riendo, porque es posta eso.

Cuando las cuatro estamos listas salimos del vestuario para ir a la cancha, donde algunas de muestras compañeras y chicas del otro equipo ya están entrando en calor. Miro la tribuna y está bastante llena, sonrío cuando localizo a Daniel, Lini, Benja, Joaqui, Ele, Flor, Agus, Fran, Tomi, Abel, Matilda y otros amigos y primos, porque cuando dije que tengo muchísimos primos lo dije posta.

Junto a Vale, la otra arquera, vamos hacia el arco para hacer nuestra entrada en calor. Minutos después las chicas comienzan con los lanzamientos al arco y demás cosas rutinarias en nuestras entradas en calor.

Llega la hora del partido y nos juntamos en una ronda todas junto a nuestros entrenadores. Nos indican la formación inicial y empiezo yo en el arco, soy la más experimentada de las dos y casi siempre comienzo hasta que analizamos un poco el nivel del otro equipo: si es flojo, Vale juega el resto del primer tiempo y a veces un poco del segundo, para que vaya ganando minutos y confianza.

Choco los cinco con Mica y Sofi, la central y la lateral incómodo titulares respectivamente, como hacemos siempre antes de cada partido.

Menos de dos minutos después las árbitros pitan y el partido comienza con las del otro equipo moviendo la pelota, pero la pierden después de un par de pases y Mica se tira literalmente de cabeza para agarrarla, le tira un pase increíble a Juliana que sigue el contragolpe y la clava en el ángulo.

•••

— ¿Qué onda ese amontonamiento? — Lara señala a un punto en medio de las tribunas, Juli, Fiore, Sofi, Maca, Jose, Marcia y yo, que estamos en el banco, miramos donde señala.

Efectivamente hay unas quince personas amontonadas con sus teléfonos en mano, y muchas más miran con curiosidad en esa dirección. Busco con la mirada a mi familia y amigos y logro hacer contacto con Dani, lo miro confundida señalando con mi cabeza el lugar del escándalo y él, todo sonriente, hace un corazón con sus manos y me señala, y a su par Tomi hace, o intenta hacer, una J con sus manos.

¿Qué? ¿Y él cómo se enteró? Yo no lo invité. Aclaro que no porque yo no quiera sino porque no surgió el tema.

— ¿Andás con Julián Álvarez? — Marcia llama mi atención. De todo el equipo es la que peor me cae, es medio yegua y víbora, mejor tenerla lejos.

— No, ¿por qué?

Se encoge de hombros. — Segunda vez que aparece en el complejo, la vez pasada te fuiste con él y ahora se acercó a tu familia. — enumera las dos situaciones con sus dedos. — Igual si no andan entonces presentamelo.

— Hay fila, reina. — se mete Sofi. — Y de todos modos él está loco por Niccó así que ninguna tenemos chance.

— Ay, qué boba sos. — me río golpeando en juego el hombro de mi amiga. Igual la risa es medio falsa e incomoda, porque tengo que decir que la idea de presentarlos para que Marcia ataque me incomoda bastante.

PERDAMONO' • Julián ÁlvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora