☄️ Curiosidad☄️

424 57 19
                                    

Capitulo 3

☄️ Curiosidad☄️

Hinata golpeó levemente la puerta de la casa de los Sting-Namikaze. Aún seguía riéndose por el hecho de que Karin hubiera convencido a Suigetsu de conservar su apellido. Obviamente la monarca Nazca no lo había tomado bien, y había tenido una leve pelea con palabras con Karin. Pero su pequeña amiga era de temer cuando discutía, Hinata la apreciaba mucho.

Esa rotación había arreglado para una visita, pero frunció el ceño cuando la puerta no fue abierta. Ella volvió a dar los leves golpes y espero. Inconsciente rebuscó en su bolso un trozo de carne de Russ y le dió un mordisco mientras miraba por la ventana que estaba al lado de la puerta. Hinata tragó, dándose cuenta que la casa parecía vacía y casi saltó cuando una voz hablo tras suyo.

-No están en casa.

Hinata se volvió y sonrió a Amina, la guardiana de Karin.

-Saludos Amina. Karin me dijo que viniera hoy-, le contó mientras sacaba otro pedazo de carne y se lo extendía a la guardiana.

Amina tomó la carne en su pequeña boca partida y lo apoyó en el suelo, para luego levantar sus ojos grises a ella.

-Tuvieron una llamada del Consejo.

Hinata alzó una ceja y levantó la mirada para ver al guardián de Suigetsu acercarse con pasos perezosos.

-¿Es por el proyecto de las crías?- preguntó volviendo la mirada a la guardiana que masticaba la carne.

Kum se sentó al lado de Amina, agitando levemente sus tres colas. La guardiana gruñó con molestia.

-No. Ya le dijimos que no lo queremos.

Hinata sonrió y se sentó en el suelo al frente de los guardianes, sacándose el bolso y abriéndolo entre ellos. Les hizo una seña para se sirvieran cuánta carne quisieran, Amina atacó sin piedad, mientras que el majestuoso Concord se mantuvo con la mirada fija en Hinata. Ella ya estaba acostumbrada a su mirada, por lo que tomó otro pedazo del Russ y lo mordió acomodando las piernas más cómodamente.

-¿Entonces por qué los llamaron? ¿Algo va mal con la cría de Karin?- se preocupó enseguida por su nueva amiga.

La doctora Tsunade les había advertido que sería posible que la cría que Karin estaba gestando sea demasiado grande para el cuerpo de ella. Le habían dicho que deberían criar con huevos Nio, pero la pelirroja era terca, diciendo que ella podría aguantar una cría de más de cuatro kilos. Hacía sólo unos pocas semanas se habían enterado que los esfuerzos habían echado fruto y ya estaban esperando a su primera descendencia. Los Mon eran de tener una cría por cada premiación, Hinata no pudo más que sorprenderse de saber que los terrestres podrían tener más de uno. Tsunade había insistido en monitorear a la cría cada pocos días, ya que no había registros de la cruza de la razas Mon con los terrestres.

Luego, también estaban las ansias de Karin de tener más "mascotas". Hinata sonrió cuando vió que Amina le gruñía a Kum cuando una de sus colas la golpeó levemente. La idea de Karin era tener una cruza entre su guardiana y el Concord. Obviamente, Suigetsu había aceptado en seguida. El macho hacía cualquier cosa por su compañera, cualquier cosa que ella quisiera, él se la daba sin dudar. A veces, le daba la impresión que Karin un poco exageraba, pero su amiga le aseguraba que era el "embarazo". Hinata se divertía ver correr a Suigetsu por algún pedido raro que ella hubiera pedido.

-No, el bebé está bien-, gruñó Amina haciéndole recordar lo que había preguntado.

-Que raro. ¿Ustedes saben o no me quieren decir?

Mí Elección (NaruHina ❤️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora