(NOVELA ACTIVA Y EN EDICIÓN)
Eran el día y la noche, el margen de lo imposible, eso absolutamente incompatible.
Pero ella sentía algo especial que le hacía querer estar cerca de él y cuando quiso alejarse, los caminos de ambos ya estaban enlazados.
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_______________________ He Never Did • .
Capítulos 8 y 9
El castillo había comenzado a ser decorado para el día siguiente que sería el esperado Yule Ball. Todos participaban en colgar guirnaldas y ayudar con los altos y pesados árboles que serían decorados y esparcidos por cada rincón de Hogwarts. El olor a dulces y chocolate se extendía por los pasillos y todos los estudiantes estaban envueltos en las bufandas y guantes de sus pertenecientes casas.
La Navidad era mi época favorita del año y en Hogwarts aún más. Todo aquí era mucho más cálido y mágico, haciendo aquella celebración más bonita y familiar. Los días anteriores, en las tardes y huecos que habíamos tenido libres, nos habíamos ocupado en darle brillo y color a la sala común de Gryffindor y a las habitaciones, no había rincón que no estuviese ocupado aunque sea por un calcetín.
Me despedí de unas compañeras de Gryffindor que ayudaban a la profesora McGonagall con unos preparativos y me dirigí hacia la clase de pociones, siempre me gustaba llegar un poco antes a esa clase ya que Snape era bastante exigente con la puntualidad y eso Harry y Ron no lo llevaban muy bien.
Alguien me detuvo tomándome del brazo, me giré y vi que Gabriel sonreía sin aliento, casi siempre iba a los sitios corriendo de un lado a otro.
—Hola...- me dio un beso y me reí al ver como le costaba un poco respirar —Es que esta maldita clase está en las mazmorras y yo estaba en lo más alto del castillo.
—Prefiero no preguntarte que hacías ahí cuando deberías estar en clase- sonreí y le acomodé unos mechones —Mi clase empieza en diez minutos -le comenté y él negó con la cabeza, sacando de su bolsillo una bolsita de seda color crema —Me basta.
Nos frenamos cerca de la entrada a la clase, Gabriel sonrió y le quitó el lazo a la bolsita, abriéndola. —Se que voy tarde, pero me conoces y sabes lo despistado que soy para todo- sacó dos gomas tipo pulseras que eran de tela, color granate. El mismo color con el que iríamos a juego para el baile. —Parecerá una tontería pero quería hacer esto de manera un poco más formal...
Me reí al ver que se ponía una de las gomas y la otra me la tendía a mi. —¿Vendrás conmigo mañana al baile?
—Ahora que me lo preguntas, quizá debería pensármelo un poco mejor- murmuré seria y su sonrisa decayó, negué con la cabeza y solté una suave carcajada por su reacción —Es broma, sabes perfectamente que sí.
Tomé la goma y me lo coloqué, Gabriel me envolvió con sus brazos, dándome varios besos en la mejilla. —Es mejor que vaya volviendo a clase.
—Deberías —sonreí y me dio un beso antes de marcharse.
Guardé la goma en mi bolso para tenerla perfecta para el día siguiente y me metí en el aula. Estaba oscura y fría como siempre, había pocas personas aún, a un lado estaban algunos de mis compañeros Gryffindor que saludé y al final estaba Draco junto a Crabbe y Goyle, cerca de ellos estaban Pansy Parkinson y el resto de sus amigas.
