Iberis ( RenGiyuu- Angs)

6. Break Up

Parte 3 "Lo hice por ti" - Ruptura

TIEMPO PRESENTE

Una asfixiante sensación de angustia en todo su rostro, su mirada azul cielo no daba crédito al reflejo que se dibujaba en ellos.

Giyuu observaba escondido tras los medianos y espinosos arbustos frente a la enrejada residencia Kanroji, el va usando un polerón de largas mangas con capucha sobre la cabeza, le daba un toque misterioso.

Sin duda era el, reconoció esas mechas naranjas en esa dorada cabellera larga, es el ex desaparecido Kyojuro, quien vestía un traje deportivo y pasaba la tarde entrenando con una chica de bonito rostro y figura esbelta detrás de ese buzo que no logro ocultar su bien dotado cuerpo.

La mujer que ahora tenia más seguridad en si misma, no solo le ofreció una toalla a su maestro, si no que ella misma levanto las manos para secar su atractivo rostro.

Aquel acto desencadeno unos electrizantes celos en cada célula de su cuerpo.

Para el azabache, resulto imposible de creer que ese par este involucrado, pero ahora la duda lo carcomía, de todas las veces que le pregunto si era bisexual, Rengoku solo aclaraba:

 No se define en el genero a donde el corazón me lleve. 

Ahora lo entendía con mas claridad que la luz que otorgaba la tarde, el no tenia condiciones para enamorarse, no importaba si fuera hombre o mujer, mientras sus sentimientos crearan un vinculo con la otra persona.

¿Me dejo por una mujer de largas trenzas?

Las emociones se juntaron y le decían que era un estúpido por preocuparse, por obligar a Uzui a confesar su paradero, por amarlo al punto de viajar a cualquier parte del mundo donde se encontrase, sin importar nada.

No fue hasta que escucho las rejas vibrar, el momento en que Kyojuro sintió una pesada mirada sobre el.

— Hay un fisgón en la puerta, iré a revisar!— Anuncio con viva voz.

Tanto la mamá de Mitsuri y ella quedaron boquiabiertas, inmediatamente la mujer mayor abrazo a su hija para que no entrara en pánico.

El sensei fue tras el misterioso hombre al que vio ocultarse tras la reja, para Giyuu fue mas fácil huir que quedarse, no le dio tiempo a razonar su actuar en ese descubrimiento que colocaba al rubio de infiel.

— Detente ahora— Ordena, alzando la voz.

En esa persecución sintió el viento gélido impactar su cara, desordenar sus doradas hebras, mientras seguía a paso raudo al escurridizo joven encapuchado. Rengoku tiene buen físico y es ágil, cada segundo se aproxima mas, hasta que alcanzo a tomar su brazo.

Giyuu bajo la mirada, sintió un dolor producto del apretón,

Frente a el estaba ese hermoso rostro frio, cuyos orbes color del mar profundo lo miraban entre aflicción y reclamo. ambos respiraban agitadamente, ninguno de los dos podía creer la inusitada forma de reencontrarse.

Si bien las palabras faltaban, el primer pensamiento de Rengoku fue que esto no debió suceder, el no tenia porque arriesgar todo su fuerzo por la borda. Era como si Giyuu estuviera ofreciendo su cuello para cortado en la guillotina, cuyo verdugo era Obanai.

— ¿Por que estas aquí, Tomioka?— Soltó esa pregunta de la manera mas seca.

— Que clase de pregunta es esa, tu sabes que necesitamos hablar—