Bound to You [vmin]

X

Hace cinco días que Taehyung no lo visita.

Solo podía mirar de mal humor la puerta cerrada del dormitorio. No podía oír nada del otro lado.

Se levantó de la cama, se dirigió hacia la puerta, levantó la mano y la golpeó lo más fuerte que pudo, ignorando la voz en su mente que no dejaba de repetirle que estaba loco. A este punto no le importaba. Estaba de mal humor, apenas había podido dormir en las últimas cuatro noches. Y todo culpa de Taehyung.

La puerta se abrió y Jimin se encontró en el extremo receptor de una mirada fría. Taehyung apoyó un ancho hombro contra el marco de la puerta, examinándolo de la cabeza a los pies. Llevaba solo un par de bóxers negros y su cabello oscuro estaba despeinado.

Se ve caliente. Fue el pensamiento que el cerebro de Jimin brindó amablemente.

Movió su peso de un pie a otro, tratando de mirar a cualquier parte que no fuera el pecho desnudo frente a él. Claramente fallo.

"¿Hay alguna razón por la que golpees mi puerta a las seis de la mañana?"

Jimin cruzó los brazos sobre su pecho. "Tengo hambre."

"Tienes hambre." Repitió Taehyung, de alguna manera logrando transmitir lo insignificante que era el hecho para él.

"Sí. No he comido nada desde ayer por la tarde." Mintió. No pudo resistirse a hechar una mirada por encima del hombro de Taehyung a la gran cama en el centro de la habitación. Estaba vacía, pero las sábanas arrugadas. "Así que tu puta se fue." Dijo antes de poder detenerse a si mismo.

Inmediatamente se arrepintió cuando la mirada de Taehyung se agudizó y algo parecido a la diversión apareció en su rostro. "¿Estabas espiando, gatito?"

Jimin lo fulminó con la mirada. "Es la cuarta noche consecutiva que no puedo dormir por sus gemidos. ¿Y de verdad tenias que follarla a las tres de la mañana en nuestro... en el baño que compartimos?" Desvió los ojos, incapaz de mantener su mirada por más tiempo. "Tengo hambre y necesito algo más para ponerme. La camiseta que me diste ya se siente asquerosa. ¿Cuándo planeas darme algo de ropa interior?"

"Es gracioso como crees que puedes perturbar mi sueño sin una buena razón." Dijo Taehyung, con voz severa.

Jimin se quedó helado.

Taehyung extendió la mano, y tiró del cuello de su camisa, acercándolo. El corazón de Jimin dio un vuelco en su garganta.

"¿O solo querías mi atención, amor?"

Enrojeciendo, Jimin negó con la cabeza violentamente. Por supuesto que no quería su atención. La había tenido en abundancia hace cinco días. Era un poco abrumate, aunque realmente no podía quejarse. Tenía una cama blanda, estaba lo suficientemente bien alimentado y las palizas de los guardias eran ahora un recuerdo lejano. Taehyung ya ni siquiera lo tocaba, diablos, ni siquiera había venido a su habitación en los últimos días. Francamente, Jimin tenía poco de qué quejarse, en lo que respecta a secuestros, y si tan solo no se hubiera visto obligado a escuchar el orgasmo de las mujeres todas las noches podría decir que no era desagradable.

Taehyung se rió entre dientes, su mano moviéndose de la camisa a su garganta. Su pulgar presionó contra el lugar de su pulso. "Pequeño mentiroso. ¿Viniste aquí porque estabas celoso de la linda dama que me hizo compañía anoche?"