O9

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Para alegría de Felix, Hyunjin cumplió su promesa y comenzó a llegar más temprano a casa del trabajo.

Había hablado con su jefe para que le descontara una hora diaria de trabajo, que no importaba si le restaba dinero del sueldo. Sin embargo, el hombre aceptó acortarle la jornada laboral sin bajarle el salario debido a que Hyunjin era un buen empleado y se lo merecía.

Todo estaba felizmente en orden en la vida del híbrido, excepto una cosa, y es que el fin de semana había llegado y le daba miedo conocer a los amigos de Hyunjin.

Él estaba bien solo con Hyunjin y no necesitaba estar con otras personas para sentirse más feliz.

─Te hará bien conocer nuevas personas ─le dijo Hyunjin como si estuviera leyendo sus pensamientos.

Ambos se estaban preparando para ir al parque. El único que faltaba por vestirse era Felix, quien estaba sentado en el borde de la cama mirando a la nada.

─Aún tengo miedo ─admitió agachando las orejas.

─No te voy a dejar en ningún momento, y si aún quieres irte después de verlos, nos iremos. ¿Está bien?

─Está bien.

─Ahora vamos a vestirte.

Hyunjin buscó ropa en su armario, toda era suya y la mayoría la compartía con Felix. Tendrían que salir a comprarle ropa, pensó.

Escogió un pantalón de mezclilla, un gorro blanco y un suéter amarillo pastel. Cuando estuvo listo, Felix se extrañó al notar que faltaba algo.

─¿Y los lentes de contacto?

─Hoy no es necesario que los lleves.

─¿Por qué?

─Es una sorpresa.

─¿Y cuál es la sorpresa?

─Si te la digo, pierde la emoción ─pellizcó la mejilla del híbrido y sonrió, mientras que Felix lo miraba con disgusto.

Salieron del departamento y caminaron unos cuantos minutos hasta llegar al parque, en donde Hyunjin pudo comprobar que llegaron antes que sus amigos. Se sentaron a esperarlos en una banca bajo un roble.

Las piernas de Felix temblaban por el miedo y la idea de salir corriendo lo estaba carcomiendo por dentro, pero se calmó cuando la mano de Hyunjin se posó sobre su muslo, sujetando fuerte y suavemente al mismo tiempo. Le gustaba esa sensación, era tranquilizante.

A lo lejos vieron un par de siluetas caminando hacia ellos, una era más pequeña que la otra. Hyunjin se puso de pie e incitó a Felix a hacer lo mismo, quien se escondió como pudo detrás del humano.

─Hey, Hyunjin, ¿cómo estás? ─saludó el más alto, chocando el puño con él.

─Todo bien, Chan. Es un gusto verte ─sonrió, entonces miró al chico más bajo, en cuya cabeza había un gorro cubriendo la mayoría de sus cabellos rojizos─. Es un gusto verte a ti también, Jeongin.

─Lo mismo digo... ─se quedó callado cuando su nariz captó un olor inusual, por el cual empezó a olfatear cerca de Hyunjin─ ¿Qué es ese olor?

─Oh, es de alguien que quiero presentarles.

Hyunjin notó que Felix no estaba a su lado, entonces lo vio asomarse tímidamente desde atrás de él. Tenía las orejas más gachas que de costumbre y en sus ojos se podía ver que estaba asustado.

─Felix, no seas tímido. Saluda ─dijo Hyunjin, moviéndose a un lado para dejar a Felix al descubierto.

─H-Hola... ─balbuceó.

You can stay ✧ HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora