III

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Abro los ojos y puedo darme cuenta que aún es de noche,el interior de esta pequeña cueva es oscuro y frío; giro la cabeza solo para ver cómo la brisa mueve las hojas de los árboles debajo de la luz de la luna; las cenizas de la fogata aún están tibias y puedo sentir un poco de calor.

No puedo dormir porque desde hace días solo una maldita cosa está en mi mente, incluso antes del ataque, todo lo que he vivido, y lo que he sufrido es culpa del maldito bastardo de All For One, que para mí mala suerte es el líder de la Aldea y el hechicero más poderoso del valle. Por su maldita culpa mi familia ha pasado días enteros sin comer, yo he tenido que esforzarme al triple que los demás y por si fuera poco estoy seguro que el idiota está detrás de lo que me pasó en las antiguas ruinas cerca del bosque. Él causó que mi familia fuera despreciada por la gente de la aldea y eso hace que quiera matarlo con mis propias manos.

Solo porque cuando nací, él aseguró que yo tenía un mal presagio, una maldición; incluso le dijo a los viejos que debían dejarme morir en la parte más seca de las praderas, por supuesto, ellos se negaron. Toda la gente del pueblo lo sigue y creen ciegamente en él, su palabra se cumple estrictamente y nadie le lleva la contraria; excepto mi familia y yo.

Incluso decidí ser guerrero para demostrarle al pueblo que yo no era algo maldito, lo cuál, no funcionó. Aquellos que deciden ser guerreros tienen la vida asegurada para ellos y sus familias, pero cuándo yo me gané el título. All For One dió la orden de que nosotros no recibiríamos los mismos tratos que los demás, dejándonos a nuestra suerte.

Las únicas personas que nos apoyan a pesar de todo son los Kirishima y los Kaminari, siento que estoy en eterna deuda con ellos, arriesgan todo al estar con nosotros.

Nadie más lo sabe pero no es la primera vez que me atacan así, pero en otras ocasiones,siempre salgo victorioso. Mis pensamientos siguen y yo sigo tratando de recordar qué pasó. Lo único que puedo recordar es una voz; una voz suave y dulce pero eso no me ayuda en este momento.
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Al día siguiente, nos dirigimos directo a la aldea, Eijiro y Denki me ayudan a cazar dos conejos y un ave pequeña para no llegar a casa con las manos vacías. El camino es largo y me doy cuenta lo grande que es el valle en realidad, a pesar de eso; se sigue sintiendo como una jaula ya que no podemos salir de aquí.

Llegamos al atardecer, primero pasamos a casa de los Kaminari, después acompaño a Eijiro a su casa en dónde su madre se encuentra algo preocupada, a lo cuál no le di importancia. Mientras yo estaba ayudando a Eijiro a bajar sus cosas del caballo, ella se encontraba esperándonos en el marco de la puerta, cuando nos acercamos los oigo hablar.

—Hola Mami, regresé, y traje muchas cosas de la frontera sur. Espero no haberlos preocupado .

—Sabía que regresarías Eiji— dijo mostrando una gran sonrisa.

La sonrisa de su madre cada que regresaba de sus largos viajes de caza era algo que el pelirrojo siempre agradecía poder ver.

—¿Cómo está TetsuTetsu?.

—Tu hermano está bien, como siempre metiéndose en unos cuántos problemas—dijo soltando una ligera risa.

Pero cuando la mujer observó a Katsuki, su semblante cambió.

—Eiji, tu y Katsuki se ven cansados ¿Por qué no pasan a tomar algo? — dijo la pelinegra con un toque más serio.

—Claro, vamos a dentro— Eijiro dirigió su vista hacia el rubio— Ven Katsuki, vamos.

Eso más que una pregunta fue una orden, aunque el rubio no lo vió mal. Estaba acostumbrado a eso.

Katsuki entró a la casa y puso observar como su mejor amigo y su madre se dirigían hacia la cocina.

—Katsuki, ¿Por qué no esperas e Eiji aquí  cerca de la puerta? Puedes sentarte justo aquí — la pelinegra señaló un pequeño sillón hecho de madera, Katsuki obedeció y se quedó ahí.

Pero había algo raro, que Bakugo empezó a notar. Los dos Kirishima se quedaron un  rato hablando en la cocina, aunque para ellos fueron 10 minutos. Para el ojirubí fue una eternidad. Cuando Eijiro regresó a ver a Katsuki, su semblante había cambiado por completo, tenía una cara sería y parecía haber escuchado la peor noticia del mundo. Empezó a hablar.

—Katsuki, necesito que me escuches atentamente— trató de sonar lo más tranquilo posible.

— ¿Qué carajos pasa Eijiro? — sin darse cuenta el rubio empezó a subir el tono de voz.

—Por favor, escucha— la preocupación inundaba su voz.

—Desde que llegamos sé que algo anda mal  ¡¿Que mierda pasa?!— Su respiración se volvió agitada, Bakugo trataba de no gritar pero le era imposible.

—Bien, no sé cómo decírtelo, pero… Tus padres desaparecieron — no había manera linda ni menos dolorosa de decirlo.

Eijiro sabía lo importante que eran sus padres para su amigo. Y sabía que ocultarle la verdad  era mucho peor.

La respiración del cenizo de pronto se aceleró, mientras procesaba la noticia que había recibido una fuerte irá lo golpeó, lágrimas empezaron a  inundar sus ojos; rápidamente salió de la casa, sabía que si se quedaba más tiempo seguramente rompería algo.

Y una sola persona aparecía en su mente, estaba seguro que él era el culpable de esto: All For One.


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Ahora sí se viene lo bueno jsjjsa

En el siguiente capítulo aparecerá Izuku uwu.

¿Opiniones? Bueno, nos leemos pronto uwu

Etéreo [BakuDeku] [AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora