Sakuraxharem (Pedidos Cerrados )

GrayxSakura

_¡Pervertido!.

La primera vez que lo vio fue cuando tenía trece años. No fue para nada ese encuentro mágico de cuentos de hadas en el que las miradas de ambos protagonistas se cruzan por casualidad e inmediatamente sienten una mágica conexión que les da a conocer que son almas gemelas.

A esa edad soñaba con conocer al amor de su vida de esa forma tan ridícula y poco realista.

Ciertamente fue una gran decepción el día en que al  salir al patio trasero de su nuevo hogar se encontró con un niño casi de la misma edad que ella completamente desnudo en la alberca de su casa.

¿Tuvieron la tan ansiada conexión de almas gemelas?.

No.

Por lo menos no de su parte. Estaba tan histerica lanzandole las másetas que se encontraba que no entendió que estaba ocurriendo con ella.

_No puede ser...

Fue hasta su segundo encuentro algunas semanas después que reconoció aquel lazo que los únia.

Furiosa había rogado a su padre para que la dejara construir una valla que impidiera al niño desnudista de la casa de alado cruzar a su alberca cuando le placiera.

Como su padre se mantenía ocupado en su trabajo la mayor parte del tiempo, ella se dedico a construir la valla sin ayuda, aprovechando que no habían clases aún.

Fue mientras descansaba que sintió una fuerte corriente eléctrica pasar por todo su cuerpo desde la punta de sus pies hasta su columna.

El niño al que había apodado pervertido la miraba seriamente desde su propio jardín.

No hubo palabras de por medio, a pesar de ser solo una niña, entendía perfectamente que quería decir aquel extraño sentimiento que se apoderaba de su cuerpo.

Ese día no dijeron nada, ninguno de los dos tuvo el valor de hablarle al otro y aunque por un segundo ella lo intentó, rápidamente cambió de opinión cuando entraron en escena dos niños que parecían muy amigos del chico.

_Tarado.

Después de ese día entendió que su relación con el pequeño pervertido apenas comenzaba.

Fue realmente difícil ya que no deseaba acercarse al niño por su costumbre tan ridícula de desnudarse al estar aburrido sin importar el sitio. El tampoco parecía interesado en hablarle, a pesar de ser almas gemelas y vecinos, el la ignoraba completamente y si se cruzaban por casualidad ambos desviaban la vista evitando aquel tema tan importante que ninguno quería tocar.

_No te pedí ayuda.

_Callate, no quiero escucharte pervertido.

_Loca.

_Pervertido.

La primera vez que mantuvieron una conversación, bastante incomoda por cierto, fue el día en que Sakura vio algo más haya de la estupidez en el chico.

Al vivir ambos al lado del otro no podían evitar caminar juntos el trayecto hacia la escuela ida y vuelta. Nunca cruzaban miradas y se mantenían con varios metros de distancia, pero ese día en específico había estado lloviendo fuertemente.

Sakura como la niña independiente que era, había empacado su paraguas y un abrigo en la mañana aún cuando el cielo se veía despejado.

El en cambio había vuelto hacer de las suyas durante la tarde y perdido la camisa de la escuela. Ella se habría burlado al verlo semidesnudo bajo la lluvia, pero no pudo hacerlo al ver como dejaba que su mejor amigo Natsu, se llevara su destrozado paraguas para evitar que empeorará su resfriado.