Naruto Shippuden: Start Again

Capítulo #8: Confianza

La confianza es la creencia en que una persona o grupo será capaz y deseará actuar de manera adecuada en una determinada situación. Por otra parte, también se refiere a la familiaridad con la que se trata a alguien. Pero la confianza también es un arma de doble filo, porque al confiar en una persona le estás dando el poder para destruirte en cuestiones de segundos. La confianza es algo que se logra con el tiempo, y también puede variar el grado de confianza. Precisamente eso es lo que tenían en estos momentos nuestros protagonistas. Una gran confianza en el otro, tanto física como emocionalmente. Hacían muchas cosas juntos, cosas que normalmente harían por separado o no harían si no tuviesen tanta confianza: comer, entrenar, tomarse de las manos al pasear por las calles de Konoha, abrazarse por varios minutos sin querer separarse y se daban besos en la mejilla. Había mucha confianza entre ellos, pero este día, las cosas cambiarían casi totalmente

Unos fugitivos rayos de sol entraron por la ventana de cierto chico con marcas de bigotes, quién se despertó inmediatamente y colocó su manta de Kurama hacia el otro lado de la cama. Se iba a levantar, pero cuando se restregó los ojos para quitarse el sueño que tenía, vió que su compañera de casa estaba justo delante suyo con una botella de leche con cereal. Ella jamás había hecho eso durante todo el mes y le extrañaba un poco, así que decidió preguntarle por qué le trajo su leche con cereal

Hinata: Naruto-kun, aquí tienes tu leche con cereal -dijo mientras le ofrecía su leche con cereal

Naruto: Amm... gracias, Hinata -agarró la botella de leche con cereal -¿Está calentita, como siempre?

Hinata: Jjj -soltó una pequeña risita -Por supuesto que sí, Naruto-kun, sabes que eso nunca se me olvida -le sonrió

Naruto: Ah, menos mal porque si no estuviera molesto -le devolvió la sonrisa

Hinata: Ay, se me olvidó algo... Buenos días, Zorrito-kun -dijo mientras se acercaba a él y acabó dándole un beso en la mejilla

Naruto: Oh... -se sonrojó medianamente -Buenos días a tí también, Hinata, se me olvidó saludarte -le devolvió el beso en la mejilla

Hinata: Que manera más bonita de comenzar el día, ¿no crees?

Naruto: Así es... No me esperaba que me visitases justo cuando me despertaría, pero realmente es algo muy bonito

Hinata: Lo que pasa es que quería darte una sorpresa

Naruto: Y lo has logrado, Hinata, por eso... te lo agradezco mucho

Hinata: De nada, Naruto-kun -dijo con un ligero sonrojo -Sabes que estoy aquí para ayudarte... -recordó algo -Por cierto, ¿tienes la tarde libre? -le preguntó

Naruto: Sí, no tengo nada que hacer -le respondió -¿A qué viene la pregunta?

Hinata: Uh, bueno... Me preguntaba si tú quisieras -empezó a jugar con sus dedos y luego dijo -¿Entrenar conmigo? Hace como una semana que no entreno debido a mis heridas, y ya estoy totalmente recuperada... ¿Qué dices?

Naruto escuchó atentamente todas las palabras de Hinata mientras la observaba detenidamente. Le gustaba mirarla cuando hablaba con él. Siempre se perdía en esos ojos perlados tan bonitos que ella tenía, y no era de menos, pues ella era muy hermosa de pies a cabeza. Luego de contemplar un poco a su amiga, recobró el sentido y luego le respondió

Naruto: ¿Entrenar, dices? -trató de confirmar la pregunta de Hinata -Bueno, en ese caso no tengo ningún problema con eso -se levantó de la cama con su botella de leche con cereal -En ese caso, ¡vamos a entrenar juntos!

Hinata: ¡Genial, sabía que no te negarías! -lo abrazó fuertemente -Iré a cambiarme de ropa, tú mientras tanto desayuna, tienes que hacerlo si quieres estar en forma para el entrenamiento de hoy. Y no te preocupes por mí, yo desayuné hace media hora