Naruto Shippuden: Start Again

Capítulo #15: Chequeo

Las relaciones fallidas son un motivo de depresión y tristeza para cualquier persona, sea hombre o mujer. ¿Quién no ha tenido un ex? La mayoría de las personas ha tenido un ex-novio o novia... Cuando acaba una relación, se crea un hueco en nuestro corazón porque habíamos encontrado el amor y lo perdimos por una que otra razón. Ese vacío interior no puede ser rellenado fácilmente y a veces ese vacío puede extenderse hasta años... Pero en las circunstancias correctas y en el momento indicado... aquel vacío ya no existirá y se intercambiará por felicidad y por buenos sentimientos. Como dijo una vez Kakashi Hatake, el ninja que copia: ''Los agujeros del corazón deben llenarlos otras personas'' Pero no todo es malo... Una relación fallida podría servir de experiencia para futuras relaciones y así no tropezarse dos veces con la misma piedra. Aunque... hay veces que una relación que ya se acabó... no se olvida

Los rayos del sol entraron lentamente por la ventana de su cuarto... Rápidamente dejó a un lado su manta de Kurama, dio un bostezo y se levantó lentamente de su cama. Se puso su ropa normal de todos los días y se dirigió a la cocina, ya que le había entrado hambre. Al llegar, vio una imagen que hizo que se paralizase casi al completo. Una muy bonita chica de ojos perlados estaba haciendo su desayuno. Pero lo curioso no era que le estuviese haciendo el desayuno, sino la ropa que llevaba. Solo vestía con una larga blusa blanca que le llegaba hasta las rodillas, sin ningún tipo de ropa interior aparente, además de un par de sandalias azules... El ver a su novia de esa manera hizo que las mejillas del rubio se enrojeciesen a más no poder y se quedó estático contemplándola... A los pocos segundos, la peliazul lo observó y no hizo más que sonrojarse y reírse por la forma en que la miraba fijamente. Bastó solo un poco de contacto visual para comenzar una conversación a primera hora de la mañana

Hinata: ¡Naruto-kun, d-deja de mirarme así! -decía avergonzada -Haces que me sonroje

Naruto: Pero es que te ves tan bonita... -comenzó a acercarse a ella

Hinata: Uh... g-gracias, Naruto-kun -volvió a sonrojarse -Y seguro que la pregunta que harás es... ¿Por qué estoy vestida así, no? -le dijo

Naruto: Exactamente, eso era lo que quería preguntarte -dijo con curiosidad

Hinata: Verás... -comenzó a dar su explicación -Como ya te diste cuenta, me desperté antes que tú para hacer el desayuno, pero hacía tanto calor que solo me puse esta blusa -señalándola -Y entonces seguí con esta misma ropa... además, no pensé que te levantarías media hora después que yo

Naruto: Hmm... ya veo... Debiste haberlo pensado, sabes que no soporto dormir sin que estés a mi lado -se fue acercando más a ella

Hinata: S-sí, lo sé, Naruto-kun, pero debía de hacer el desayuno para nosotros, así que tuve que levantarme -dijo aún sonrojada

Naruto: No sabes el deseo inmenso que sentí de abalanzarme sobre ti y besarte miles de veces -puso su mano derecha alrededor de su cintura

Hinata: N-naruto-kun... m-me encantaría besarte también, pero... Debo hacer el desayuno, aún no lo he terminado -puso sus brazos alrededor del cuello de su novio

Naruto: Puedes dejarlo para después, solo serán un par de minutos... Por favor, déjame hacerlo -le suplicó

Hinata: -suspiró un poco -Bueno... ¿prometes que solo serán unos minutos? -le preguntó

Naruto: ¿Cuando no he cumplido una promesa, Hinata? -le respondió con otra pregunta

Hinata: Cierto... me convenciste...

La Hyuga sonrió ligeramente y el Uzumaki también lo hizo después de ella, pero segundos después él la besó rápidamente, sorprendiéndola, pero eso no permitió que no correspondiese a su beso y lo hizo mientras sus labios se combinan en uno solo... Les encantaba besarse cada vez que tenían la oportunidad, era su adicción... El placer que les proporcionaba unir sus labios y probar del sabor del otro era simplemente increíble. Mientras se besaban, Naruto cargó a Hinata y la posicionó sobre la mesa de la cocina, ignorando los platos que había en ese sitio, de todas formas, la mayoría de los platos se encontraban en el lavamanos y cuando ambos estuvieron encima de la mesa él comenzó a besar el cuello de su pareja de forma bastante lujuriosa. Debido a la sensación de euforia que le causaba ser besada en su cuello por Naruto, Hinata dejó escapar pequeños gemidos por cada beso que el chico de bigotes plantaba en su cuello. Sabiendo a donde llegaría esto si ambos no se detenían, Hinata decidió terminar su sesión de besos separándose de su chico