Capítulo 1

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                Mi lugar... Mi comienzo

SAMIRA

Siempre he sido una persona muy responsable quizá sea un don o así podrían ser los jóvenes en estos tiempos nosé, pero tenía algo —pensar las cosas me hacía un total conflicto conmigo misma— sobre todo era distraída solía pensar demasiado.

Vivía en Londres Inglaterra. Sí, aquel país en donde el clima varía, las lluvias son totalmente frecuentes y en dónde la primavera es particularmente inestable, también puedes encontrar diversos lugares turísticos y exóticos "sin que te pierdas" que te llamen mucho la atención ¡Tú decides! Pero hermoso país.

Mi casa era ubicada en un espacio pequeño de la ciudad, pero soportable al momento de lograr transportarse, habitada por mis abuelos, mi hermano y yo, por cierto, también pero no menos importante nuestro perro copo, sí como los de nieve.

Por otro lado, mis padres vivían en otro lugar del país ambos separados, saben los extrañaba quizás no juntos, pero me refiero el cariño de ambos hacia mi hermano y a mí, todo lo apreciable que compartían. No obstante mis abuelos nos ayudaban a compartir aventuras juntos sin embargo nos tomaban en cuenta en la mayor parte posible hasta el punto de consolarnos en este caso a mi persona sin duda ya que era el tipo de humano más cerrado. Nuestro apellido materno era el que casualmente utilizaba para acortar mi nombre Bristol, todos somos originarios de aquí y me agrada.

Dicho a todo estudiaba apenas segundo grado de preparatoria, sí ese grado en donde los jóvenes empezaban a planear su futuro y acoplarse a nuevas cosas y más conocimientos, no solía ser el tipo de chica popular en las instalaciones más bien era de esas que parecían simplemente invisible y vista a la vez ante el mundo que me rodeaba quizá catalogaría alguna fobia social. El instituto quedaba a un extremo de la ciudad específicamente casi en el centro, un escenario cautivante y apropiado.

Sin duda odiaba los eventos que ellos realizaban, deportivos y todo en donde tenga que participar la comunidad estudiantil en verdad así parecía mi situación, pero eso no impedía divertirme —Cierto— ante todo mi vida era quejarse de ello de todo el exterior lo disfrutaba hacerlo.

Eventualmente de tal forma se movía mi vida, no ser social, responsable, una persona callada, muy pasiva, podía soportarlo al final de cuenta era yo y mi vida al parecer tenía todo bajo control y la mayor parte cambió cuando lo conocí a él Adriel Wembley York que en todo este transcurso me pudo enseñar hasta lo más mínimo y no pensé que se volviera más en mi vida, que se crearía un gran lazo entre esa persona y yo formando una gran amistad ¿O un sentimiento más? Siendo débil ante su presencia y su alma entera.





























Aquí les dejo este capítulo. Claro que pueden conocer algo de SAMIRA y hay más efectivamente solo para prender el comienzo :)

Y la acompañarán en su historia, no solo suya sino de él mejor dicho de "Ellos"
Muak muak


Porque quiero tocar aquel atardecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora