Héroe Accidental

Capítulo 11: Equipos Genin

La hoz de mi kusari-gama, Jinchu-Maru, silbó en el aire antes de que la hoja se hundiera en el cráneo de un zombi. Con un mínimo esfuerzo, lo arranqué de su lugar incrustado y lo recuperé tirando de esta cadena, apenas sujetando la bilis que amenazaba con ser regurgitada por mi garganta.

Dicho zombi vaciló un poco antes de caer de rodillas y colapsar en humo negro, dejando atrás un orbe blanco brillante. Hice una mueca al verlo antes de acercarme de mala gana al orbe de botín para recoger mis recompensas.

La mazmorra de rango E podría ser lo más difícil que he encontrado...

*escena retrospectiva*

Entré a la mazmorra de rango E igual que antes, a través del panel de opciones que apareció ante mí mientras me acercaba al recinto del Clan Uchiha. Como era de esperar, la mazmorra de rango F que había limpiado previamente ya no era una opción, tenía una línea tachada y la palabra 'CLEARED' superpuesta. Sin embargo, el resto de las mazmorras no tenían tales restricciones.

Al seleccionar la mazmorra de rango E, al igual que antes, el mundo a mi alrededor se rompió en pedazos antes de ser reemplazado por uno diferente. Una vez más, el día se convirtió en noche en un instante mientras mi entorno inmediato, antes vacío, ahora contenía cuerpos inmóviles de lo que supuse que eran zombis.

¡Has entrado en la mazmorra de rango E [Uchiha Natural Dungeon]!

Condición clara: elimina al jefe.

Sonriendo, recuperé a Jinchu-Maru de mi inventario. A los efectos de la masacre en masa en una mazmorra, la hoz de cadena era un excelente instrumento de letalidad precisa pero generalizada. El extremo ponderado con suficiente inercia podía aplastar cráneos y romper huesos con facilidad, mientras que la hoz segaba vidas tan fácilmente como lo haría con el trigo. Sin mencionar la cadena que conectaba ambos extremos que permitía el combate de mediano a largo alcance, permitiéndome matar desde la distancia sin preocuparme por mi propia seguridad.

Justo cuando comencé a balancear el extremo pesado de mi hoz de cadena mientras activaba mi Sharingan, la agudeza visual mejorada provista por mi kekkei genkai me mostró algo horrible.

Si el tema de la mazmorra de rango E anterior eran civiles, entonces el tema de este era... estudiantes de la academia y genin recién graduados.

*final del recuerdo*

Durante las últimas tres horas, me vi obligado a sacrificar niños zombis. Fue difícil, sin mencionar las cicatrices mentales, por decir lo menos. Solo pude soltar una risa amarga ante la cruel broma que el sistema me estaba jugando.

Se hizo más fácil a medida que pasaba el tiempo, ya que tuve la desafortunada experiencia de matar niños zombis en la última mazmorra que también contenía algunos, pero pocos y distantes entre sí. La mazmorra rango E, sin embargo, era todos los niños de zombies. Sin un solo zombi adulto a la vista.

Estaba seguro de que sin la claridad mental proporcionada por Gamer's Mind, podría haber descendido a una locura más profunda que la de Mizuki anoche. El costo mental de tener que mirar a esos niños a sus fríos ojos muertos antes de matarlos era indescriptible. Pude hacer gimnasia mental, justificando mis acciones y racionalizando que estos niños no eran reales; era imposible que hubiera tantos estudiantes o genins de la academia Uchiha.

Ya había pasado por más de cien de ellos, y parecía inverosímil que hubiera tantos niños en un clan con apenas un par de miles de miembros en su clan. Al menos, así fue como pude racionalizarme a mí mismo por haberlos matado. De todos modos, todavía era repugnante hacerlo.