teacher Bakugo! ;; Bakukiri

06

cuando su alarma biológica se encargó de despertarlo, la primera imagen del día fue ver a bakugo dormido a un lado suyo, queriendo capturar la armoniosa expresión de katsuki en su cabeza ¿él se arrepentiría de lo que había sucedido? esperaba que no. buscó con su mirada su celular, recordando haberlo dejado en la sala de estar del apartamento. con cuidado retiró las manos del contrario y se encargó de ir por su teléfono, y de paso, hacer algo de desayunar.

por otro lado, cuando katsuki despertó y no vió a ejiro a un lado de él, sintió una pequeña presión en su pecho ¿ejiro se había ido?

salió de la habitación, yendo a la sala de estar donde le llegó el aroma a comida, sintiendo cierta emoción de pensar que kirishima no se había ido aceleró su paso a la cocina, donde sí, estaba el pelirrojo cocinando felizmente mientras tarareaba una canción.

— buenos días. — saludó, oyendo su voz ronca y sobresaltando al pelirrojo.

— buenos días blasty, ¿cómo amaneciste? — devolvió el saludo kirishima, sonriendo feliz, como siempre; iluminando el día de katsuki.

— bien, pero pudo ser mejor si estabas ahí.

— perdona, estaba buscando mi celular, himiko ya me publicó en facebook diciendo que desaparecí.

— muy confianzudos tus alumnos.

la mañana pasó con una platica amena y desayunando la comida de kirishima. había un sentimiento cálido en el corazón de ambos, estaban felices pero sabían que tenían una plática pendiente.

el pasado es algo difícil de olvidar, ambos eran jóvenes y los dos terminaron su relación no de una forma muy amigable, duraron años sin comunicarse entre ellos, katsuki arrepentido y kirishima con el corazón roto, estaban pasando por un proceso de superación y estaba llevando su tiempo. para cerrar el episodio de la relación tóxica que llegaron a tener, tenían que platicar y aclarar las cosas. pero ¿cuando?

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lunes por la mañana, todos odiamos los lunes. kirishima se quería aventar por la ventana, el viernes de esa semana tenían previsto un campamento los de primer año, y estaba bien, estaba emocionado, pero él sabía que esa semana sería ajetreada; estaba el hecho de que iida hace algunas horas atrás había mandado un comunicado a los docentes, dónde informaba que al día siguiente tendrían una junta donde presentarían al nuevo profesor de la ua, el miércoles él ya tenía que comenzar a preparar las cosas del campamento, el jueves junta en la agencia de héroes donde pertenecía y patrullar, y el viernes lo ya mencionado anteriormente.

su día pasaba lento, él ya tenía el suficiente trabajo en sus hombros que incluso lo único que había hecho era un cuestionario a sus alumnos para mantenerlos ocupados – sabiendo de memoria que si los dejaba hacer lo que les plazca se haría un desastre total en el aula – y él continuar con otros pendientes.

era su última hora antes del receso, y tanto él como sus alumnos, esperaban abrumados el timbre. ¿ya mencioné que todos odiaban el lunes?

  — ¡profe déjenos salir temprano a la cafetería!

  — no muchachos terminen su tra-

gracias al cielo, el timbre dio anuncio al receso. todos salieron disparados a la cafetería, entre ese todos iba incluido kirishima que estaba hambriento de igual forma.