¿Quién lo hubiera pensado que una Peonia causado tantos problemas?
Ven a conocer esta historia de la travesía de la Peonia que volverá ser un desastre mas de lo que ya esta la Secta GusuLan por el estimado Ex-Patriarca Yiling.
¿Acaso volverá de nuev...
El suave golpe resuena en la puerta de madera blanca con grabados de nubes celestes, con la espera del permiso del propietario de la residencia.
— Adelante — Es respondido por una voz masculina cansada pero amable
La persona de afuera abre la puerta sin prisa, encontrándose con el propietario sentado detrás de una mesita; con una tetera, una taza. Mientras el hombre de hermoso rostro sostiene en su mano derecha un libro abierto.
Esa persona al verlo entrar deja su libro en la mesita.
El hermoso hombre lo observa con cariño, sonríe suavemente soltando un leve suspiro indescifrable para la otra persona de hermosos ojos azules que puede ser confundido por amatistas.
— A-Cheng. Es bueno verte de nuevo. ¿En qué puedo ayudarte?
— A-Huan. — Lo llamo. Sorprendiendo al nombrado, es una de las pocas veces que lo llama así. — Tenemos que hablar.
Las sorpresas no acabaron ahí.
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Los pasos apresurados son escuchadas en los territorios de la Secta Gusu Lan. Un grupo de discípulos Lan que pasaba por ahí ven alguien de baja estatura caminando apresuradamente sin dejar de mirar atrás. En el rostro de esa persona refleja terror.
— ¿Porque huye? — pregunta uno de los discípulos del grupo.
— No tengo idea — responde indiferente el otro Lan.
— No estamos siendo atacados — dice un tercero observando al su alrededor.
— Estoy alucinando. ¿Porque creí a ver visto una chica? — pregunta confundido el último Lan del grupo, tratando de ver a esa distancia aquella persona.
Los 3 Lan lo miran incrédulos a su amigo por aquella pregunta.
— Amigo creo que las reglas te están afectando en la cabeza — dice el segundo Lan apuntado su cabeza sin dejar de verlo
— ¡No! Yo solo digo que... — no completo la oración por el grito de alguien que se dirige a su dirección.
Los 4 Lan giran su mirada a atrás. Notando una segunda persona que conocen muy bien, la persona que es la perdición de la Secta Lan — Según las palabras del Gran maestro Lan Qiren — y el que da más vida en su monótona vida de todos los discípulos.
Wei Wuxian el favorito de todos los discípulos Lan (Excepto Lan Qiren).
— ¡A-Lian...! — llama sin detener sus pasos — ¡A-Lian! — llama de nuevo— ¿Dónde estás? ¿Dónde estará? — se detiene, observa al su alrededor tratando de encontrar a la pequeña niña, pero lo único que encuentra es un grupo de discípulos Lan
— ¡Mayor Wei! — lo llaman uno de los discípulos del grupo. Wei Ying sonríe, va hacia ellos a pasos apresurados. — Mayor/Sénior Wei — se inclinan por respeto a su mayor.
— No es necesario. No es necesario que se inclinen en mi presencia — dice avergonzado con un leve rubor en sus mejillas — Por casualidad han visto alguien de baja estatura. Cómo de este tamaño. — con su mano derecha muestra la supuesta altura del infante que no llega a más de su cintura — Cabellos castaño largo con un gran moño rojo que tintinea cuando se mueve. Ojos grises grandes. Y túnicas Lan. ¿La han visto? — pregunta sonriente esperanzado
— Lo sentimos pero no la hemos visto — responde el primer discípulo Lan del grupo. La sonrisa de Wei Ying desaparece por la decepcionante respuesta.
— Ya veo. — Suelta un suspiro — si de casualidad la ven me avisan inmediatamente. — Los 3 Lan asienten, pero el último Lan se perdía en sus pensamientos. Hasta que recuerdo aquella persona que vieron huir con apresuradamente.
— En esa dirección — apunta a la izquierda lo que lo lleva en la vegetación y algunas residencias privadas — ví alguien parecido con esas características
— Gracias. En verdad gracias en ayudarme. Los veré luego. — se retira con prisa a la dirección indicada
— No es nada Mayor Wei — responde casi gritando por la diferencia de distancia de ellos — ¡Espera! ¿Es un niño o niña? — Fue demasiado tarde, ya no se vía a la vista.
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En una parte de la vegetación se encuentra una pequeña niña corriendo hasta que se detiene, observa al su alrededor un lugar en donde esconderse.
—A-Lian — el llamado del ojo-plata es escuchado por la castaña — A-Lian ¿Quiero que pruebes esté nuevo platillo que hecho especialmente para ti? — Su voz suena alegro — está vez le agregué menos picante "creo"
A-Lian al escuchar esa duda de Wei Ying, el pánico le invade poniendo su piel de gallina. Corre nuevamente, algunas distancia ve una cabaña solitaria corre deprisa, entra a la residencia sin verificar si alguien habita ese lugar. Cierra la puerta con prisa, una vez estando dentro suelta un suspiro de aliviada.
La castaña regula su respiración hasta al verse calmado, una vez hecho eso se digna observa la residencia pero el pánico vuelve una vez más.
"Mierda. Mierda. Mierda. Por qué tenía que ser el"
Dentro de esa habitación se encuentra nada más ni menos que Lan Xichen, el primer maestro de Jade, Líder de la Secta Gusu Lan, hermano mayor de su Lan-Zufu.
Lan Xichen lo observa curioso por el repentino invasión a su residencia. La pequeña lo observa nerviosamente. Sus miradas se encuentra, provocando que el nerviosismo de la pequeña aumenté más.
— Hola. ¿Puedo saber por qué has entrado a esta residencia sin permiso? Y ¿Quién eres tú? No te había visto antes — pregunta amablemente dedicándole una sonrisa cansada
"Mierda el abuelo me romperá las piernas"
Continuará.....
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