el omega pelirrojo

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Punto de vista de Mihawk:Después de un largo día de trabajo, en lugar de dirigirme directamente a casa, decidí hacer una parada en una cafetería. Al entrar, me senté junto a la ventana y un aroma peculiar capturó mi atención, no era el café, era algo más. Mis ojos se posaron en un omega pelirrojo que instantáneamente llamó mi atención. Su figura era perfecta, con una piel ligeramente bronceada, cabello rojo y un cuerpo bien definido. Me quedé observándolo hasta que una camarera de cabello verde se acercó.

- ¡Buenas tardes! ¿Qué le gustaría pedir? - dijo la chica con una sonrisa.

- Seré directo, ¿cómo se llama ese omega? - pregunté señalando con la mirada.

- Se llama Shanks - respondió con la misma sonrisa.

- Quiero que me atienda él - dije con frialdad.

La camarera se fue y pronto llegó el omega pelirrojo.

- Un gusto, ¿qué pedirá? - preguntó el chico con una sonrisa.

- Seré franco, ¿tienes pareja? - pregunté sin rodeos.

- No, no la tengo - respondió amablemente.

- ¿Quieres tomar algo conmigo? - pregunté con una leve sonrisa.

-Estoy en hora de trabajo - dijo apenado.

-Tal vez más tarde - le dije con la misma sonrisa.

-Shanks, tu turno ha terminado - le dijo la chica guiñándole el ojo.

- Ves, ahora estás libre - le dije mirándolo.

Punto de vista de Shanks:Desde que ese Alpha entró, su aroma me envolvió. Makimo me indicó que lo atendiera, y quedé hipnotizado por sus ojos color oro y su barba bien cuidada. Hablamos y me invitó a tomar algo, aunque aún estaba en horario laboral. De repente, Makimo me dijo que mi turno había terminado, ¡pero aún faltaban dos horas para cerrar! Después, vi cómo me guiñaba un ojo, sabía lo que hacía. Supongo que no pasaría nada si compartía una copa con él.

- Acepto - dije mirándolo.

-Vamos por una copa - se levantó y me ofreció su mano.

-Bien - acepté.

Me llevó a un apartamento que resultó ser su casa. Traté de mantener la calma, me senté y él fue a la cocina a buscar copas y un vino costoso.

- Cuéntame sobre ti - me dijo sentándose a mi lado y ofreciéndome una copa.

- Me llamo Shanks, tengo 18 años, trabajo en la cafetería a la que viniste, soy soltero, estudio y soy omega - respondí sinceramente.- ¿Y tú?

- Me llamo Drakule Mihawk, tengo 32 años, soy empresario, soltero, me gusta el café y soy Alpha - dijo un poco frío.

Al escuchar su nombre, me sorprendí. Estaba sentado junto al gran empresario, en su casa, interesado en mí. Era increíble.

-¿Tienes 32 años? - pregunté sorprendido.

- Sí - respondió fríamente.

- ves más joven - comenté riendo.

-Seré sincero, me gustaste desde que te vi. Nunca había olido a un omega. Supongo que es el destino - dijo serenamente, tomando su copa de vino.

- La verdad es que me gustaste desde que entraste en la cafetería. También puedo olerte. Supongo que estamos destinados - dije sonrojado.

Él rio y me quitó la copa de la mano, mirándome con sus profundos ojos dorados.

- ¿Quieres probar algo conmigo, Shanks? - preguntó el Alpha.

- Claro, Drakule - respondí coquetamente.

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Editada: [02/06/2024]

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