17. Valhalla

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El gran día llego, todo a sido un completo problema.

Baji se unió a Valhalla, golpeo a Chifuyu, decreto la guerra, Mikey quiere recuperarlo, Takemichi quiere sacar a Kisaki de la pandilla, y yo, yo quiero estar en una playa con mis amigos.

Tenía dos días sin hablar con Keisuke, decidimos que yo intervendría si algo se salia de las manos (obviamente esto lo dije yo, y Baji acepto a regañadientes).

Justo ahora, todos estábamos detrás de un gran portón, detrás de el esta un estacionamiento de autos viejos, con algunas personas que verán la pelea, estaba preparada para los comentarios machistas.

—¿Están listos? —Gritó Draken.

Todos los integrantes hicimos un sonido aprobando, y el portón abrió.

Había un hombre dando las instrucciones de la pelea, pero la vista me daba vueltas, y todo se empezaba a ver borroso.

Vi a la pandilla supuestamente perteneciente a Kisaki, pero no encontré a Baji por ningún lado, ¿No llego?

Me centre en mis pensamientos y técnicas de pelea, sabia que era buena, maldición soy magnífica peleando, pero los nervios me están consumiendo, quiero ver a Keisuke.

Recobre el sentido de un empujón por parte de Sarah, quien me alerto de un hombre alto que venia hacia mi.

Golpeé, golpeé y golpeé hasta que no reconocí a quien golpeaba, solo estaba segura de que cualquier cosa vestida de blanco y que no tenga el cabello negro y largo, se llevara mis nudillos por la cara.

En algún momento vi que Draken peleaba con un bicolor que creía que se llamaba Hanma, quería ayudar pero se veía como algo personal, estaba segura de que Draken puede.

Seguí golpeando personas, me encontré con todos los chicos, más o menos, y cuando quise seguir un golpe paso justo por delante de mi cara.

—¡Lo siento! —Grito un chico, era el que me observaba cuando pelee con Smiley, tenía el cabello largo y rubio, y un tapabocas.

—¡No mates a nadie! —Le grité mientras seguía corriendo buscando a quien golpear.

—Te mantuve a mi lado porque sabias pelear.

Esa voz.

Keisuke, mas te vale que estés bien.

Corrí tan rápido como pude, necesitaba ver a Baji, y no lo encontraba por ningún lado, escuchaba sus voces ¡¿Donde demonios están?!

De golpe me frene, y vi como Kazutora se acercaba a Baji con un cuchillo en su mano.

Mierda, no, no, no.

Por instinto corrí, juro que nunca había corrido tanto en mi vida, pero corrí hasta estar detrás de Baji, estaba por enfrentar a Kazutora.

La sorpresa me la lleve yo al sentir la mano de Kazutora en mi vientre, y no solo tenía su mano, obviamente.

Estaba boquiabierta, no quería mirar hacia abajo, tal vez estaba en shock, por pensar que eso le podría haber pasado a Keisuke, o porque me estaban apuñalando el vientre.

Observe a Kazutora, y como sus ojos se movían de un lado a otro, caí al piso, Baji y los chicos voltearon en mi dirección, con una expresión neutral y de sorpresa a la vez, creo que no procesaban lo que pasaba, y si no se movían rápido moriría.

Vi como Baji tocaba repetidamente a Kazutora en su brazo, tratando de salir del shock, ¿Como era posible que todos estuviéramos sorprendidos? Bueno, tampoco es que ves todos los días como apuñalan a una amiga pero, necesitaba ayuda.

—Bu-busca ayuda —Le dijo Baji a Kazutora.

El nombrado salio corriendo, pero no llego tan lejos ya que un rubio lo sujeto, no pude observar mas, ya que un pelinegro estaba casi encima de mi tratando de detener mi sangrado.

Me dispuse a mirarlo, era muy atractivo y tierno.

Baji era una persona maravillosa, y quería decírselo, quería decirle muchas cosas, pero no podía, la sangre que estaba acumulándose en mi garganta no me dejaba hablar. En ese momento, tuve unas terribles ganas de llorar, siento que no le he demostrado suficiente a Baji, quiero que sepa que es la mejor persona que conocí, que es el chico con el corazón más puro, y me hace la persona más feliz del mundo, quería demostrárselo, pero esas palabras, no salían, sentía sangre en la garganta que me impedía hablar.

—Estarás bien, todo esta bien —Me decía, pero algo me decía que lo estaba diciendo para si mismo.

Levante mi mano un poco.

—Oye oye, quedate tranquila ¿Bien? —Definitivamente mi corazón quería llorar al escucharlo con la voz quebrada.

Como pude, y haciéndole señas de que me dejara moverme, me voltee un poco con cuidado de no mover mas el cuchillo, y escupí toda, o la mayoría de la sangre.

—Keisuke —Le hable, sus ojos fueron hacia los mios con rapidez —No se que carajos hiciste —Ahora me miraba con confusión.

—¿De que hablas, linda?

—No se que hiciste... pero me hiciste enamorarme de ti, en solo unas semanas.

Sonrió un poco, casi salio un carcajada, y apenas me di cuenta de que estaba llorando.

—No llores, por favor —Dije Volviéndome a recostar, esta vez en su pecho.

—Makima, si tengo idea de lo que es el amor, estoy seguro de que te amo, no quiero que me dejes por protegerme, era para mi —Baji seguía llorando, y mi alma se estaba terminando de romper.

Puse una mano en su mejilla.

—Me gustan los chicos que salvan a las personas, no dejes que Mikey se convierta en un asesino, ni que Kazutora muera, salvalos.

—No, no, te debería salvar a ti, ya la ambulancia llega, resiste un poco.

—Te amo, Keisuke, salva a tus amigos, por favor.

Con lágrimas aun en los ojos, me recostó un poco, dejándome recostada, mirando el cielo, era hermoso, las nubes estaban resplandecientes, como si fuera un día hermoso, y no estuvieran a punto de morir dos jóvenes menores de dieciocho años.

¿Recuerdan cuando les dije como quería morir?

Creo que sería así.

El cielo estaba brillante, las nubes eran surrealistas, parecían que estuvieran pintadas en un lienzo, era hermoso.

Lo último que escuche fueron, gritos de pelea, gritos de que fuera fuerte, y alguna ambulancia que se me hacia muy lejana.

Lo último que escuche fueron, gritos de pelea, gritos de que fuera fuerte, y alguna ambulancia que se me hacia muy lejana

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—Maki, Estas bien?

—¿Que ¿Quien habla?

—¿Que dices? Levantate, las personas ya nos ven raro —Se quejo la voz.

—¿Sarah?

—No, tu abuelita, ahora muevete.

—Pero yo estaba casi muerta, que...

—Makima, te acabas de caer, no me digas que te lastimaste el cerebro.

—No, para nada, solo... creo que acabo de tener una visión —Le dije con expresión confundida.

   
Capítulo sin corregir.

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⏰ Última actualización: Jul 09, 2022 ⏰

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Tear | Tokyo RevengersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora