𝐃𝐞𝐦𝐚𝐬𝐢𝐚𝐝𝐨 𝐂𝐞𝐫𝐜𝐚 [TaeJin]

Capítulo 2

—¿Dónde está?

El débil sonido de su voz lo abrumó. Trató de aclararse la garganta, pero le resultó imposible.

—Shh.. —susurró Jimin—. Tranquilo.

Taehyung trató de abrir los ojos. Cuando lo consiguió, deseó no haberlo hecho.

¿Qué diablos le había pasado?

El hombro no le dolía, al menos en aquel momento, pero se sentía como si la cabeza le fuera a explotar. Sentía los músculos muy débiles, como si se negaran a cumplir las órdenes que les enviaba el cerebro.

¿Dónde estaba Jungkook? ¿Dónde estaba él?

—El chico...

Jimin le acercó a los labios un vaso de agua con una pajita. Taehyung tomó un sorbo de agua y empezó a mover un poco el brazo. Le parecía como si tuviera fuego dentro de él. El hombro también le dolía. Apretó los dientes, tratando de tomar aliento.

—La anestesia se te está pasando —explicó Jimin—. Estarás algo adormilado un poco más de tiempo, pero, en general, te encuentras muy bien. Han tenido que dejarte dentro la bala. Con esa ya tienes dos, ¿no? Si te la hubieran sacado te habrían provocado más daños. Ya has perdido mucha sangre... ¡Me has dado un susto de muerte, Tae! ¿Es que no sabes que si recibes un disparo debes tumbarte? Como no has dejado de mover el brazo de un lado a otro, has provocado que la hemorragia sea aún más fuerte.

—¿Dónde diablos está? —insistió Taehyung.

—Jungkook ha estado con él desde que tú perdiste el conocimiento y te golpeaste la cabeza contra el suelo. Sí, por eso te duele tanto. Me sorprende que no te hayas provocado una conmoción cerebral. Si no tuvieras que comportarte como un macho, si nos hubieras dicho que te ibas a desmayar...

—No me desmayé —gruñó Taehyung—. Perdí el conocimiento por toda la sangre que estaba perdiendo.

—Sí, bueno, a fin de cuentas es lo mismo.

—Jimin... Acércate un poco.. —susurró. Su amigo, lleno de preocupación, se acercó a él—. ¿¿Dónde diablos está?? —añadió, gritando con todas sus fuerzas.

—¡Muy bien! ¡Muy bien! ¡No tienes que reventarme el tímpano! Tú me dijiste que no dejara que se marchara. Ni Jungkook ni yo sabíamos si eso significaba que había que arrestarlo o si era la persona que habías estado observando. Ya me olía que era un chico.

—¿No lo habrás...?

—No, no lo he entregado a la policía. Por supuesto, lo interrogaron, pero Jungkook se fue con ellos a la comisaría y lo recogió después. Está bien. Sólo se encuentra un poco asustado y no hace más que decir que eres un héroe. Supongo que eso no debería sorprenderme. Afirma que la bala que te hirió a ti iba destinada para él. Quiere verte porque siente gratitud hacia ti, pero como no sabíamos lo que estaba pasando...