Capitulo 10

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Langa se había quedado unos segundo observando a ambos chicos, sus puños se estaban tornando colorados debido a la fuerza con la cual los estaba apretando. ¿Cómo es que su novio podía abrazar tan fácilmente a alguien más? "Ex novio" se recordó. Pero es que Langa no quería llamar a Reki de esa manera, hacerlo solo significaría que era real y el aún conservaba la esperanza de poder arreglar las cosas con Reki, ya lo habían hecho una vez y esta no iba a ser la excepción.

Pero- ¿quien era ese tipo? Reki jamás se lo había nombrado antes, ¿y por qué estaba en su casa? El enojo que sentía el canadiense se iba extendiéndose cada vez más, hasta llegar al punto de ya no poder retenerlo. Con pasos rápido se acerco a ellos.

-¡Reki!- Exclamo Langa, una expresión  seria se mostraba en su rostro.

Reki se aparto rápidamente de Kenji al escuchar la voz de Langa, sin embargo no emitió palabra alguna.

-Reki, ¿quién es el?- Langa ignoro la expresión fría que se encontraba en el rostro de Reki y aparto su vista del japones y la dirigió al rubio que se encontraba al lado de el, la cual tenia una expresión seria

-¿Que haces tu aquí?-Devolvió la pregunta el pelirrojo

-Esperaba que pudiéramos hablar, pero veo que estabas muy ocupado con este, ¿no?

-No tienes ningún derecho de reclamar nada, lo nuestro se termino Langa- Contesto el japones, con su ceño fruncido.

Langa estaba apunto de contestarle a Reki, pero el Frances se le adelanto.

-¿Así que tu eres el famoso Langa?- El rostro de Kenji no mostraba ninguna emoción, pero sus ojos jamás se apartaron del canadiense quien llego a sentir la gélida mira del otro.

-Sí, soy Langa ¿Y tu quién eres?- Contesto enojado el peli-azul.

-Soy Kenji, amigo de Reki, pero próximamente espero ser algo más que eso.- El rostro de Langa cambio radicalmente, si antes estaba enojado, ahora estaba furioso, ¿Cómo se atrevia ese mocoso a decir semejante cosa?

-Ke-Kenji- Susurro Reki, algo que solo su amigo Frances pudo escuchar.

-Tranquilo, lo tengo todo bajo control.- Susurro de igual manera Kenji, para después regalarle una dulce sonrisa a Reki. 

-Pues lamento destrozar tus esperanzas tan rápido, pero Reki es mio y eso nada ni nadie lo va a cambiar.- Contesto Langa. Un risa burlesca de parte de Kenji fue lo que se escucho después de las palabras de Langa.

-¿De que te ríes imbecil?- Langa estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para no soltarle un puñetazo en esos momentos.

-De ti, ¿De que más si no? ¿Que derecho tienes para llamar a Reki tuyo? Para empezar el ya rompió contigo y es triste que no puedas superarlo, amigo. Además, yo podría hacer a Reki mucho más feliz que tu, porque hasta donde yo se, lo único que has causado en Reki ha sido inseguridades y tristezas. El merece ser tratado como si fuera un diamante, aquel que tenga la suerte de llamarlo su novio debería de sentirse la persona mas afortunada del mundo. Deberías de agradecer que no te he dado el golpe que te mereces, cada día que miraba a Reki sin su maravillosa sonrisa me moría de ganas por ir y partirte la cara.

Langa no tuvo ni oportunidad para contestar, puesto que rápidamente Kenji entrelazo sus manos con la de Reki y se lo llevo de ahí. Reki volteo a ver hacia atrás y lo único que se encontró fue a un Langa cabizbajo, lucho contra su corazón quien le pedía que fuera a consolar a su amado, un suave apretón en sus manos le hizo reaccionar y seguir con su camino, dejando al canadiense atrás. Tal vez si hubiera visto las lágrimas que caían del rostro de Langa, hubiera dado marcha atrás. Solo tal vez....

Nuestra Promesa No Fue Lo Único Roto Esa Noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora