Amor Dulce/ Harry Potter

26

Harry

Las palabras de la tía de Mia corrían por mi cabeza, "Acabara como tu madre" como alguien puede ser tan mala persona, tan oscura. Es peor de lo que pensaba.

--No es asunto tuyo Harry, no tienes que estar matándote la cabeza por mis problemas.-- detestaba que se hiciera la fuerte cuando no lo es, todos necesitan ayuda.

--Todos necesitan ayuda, yo te puedo ayudar a....

--¿A que? Harry te dije que no es asunto tuyo, perdón por la actitud de Gabriela... pero no necesito tu ayuda.

--Pero.... tengo que ayudarte, no me gusta que las personas que quiero sufran.

--¡No quiero tu ayuda! ¡No quiero tu lastima!

--¡ENTONCES DE QUIEN MIA! ¡Enserio quiero ayudarte a sobrellevar las cosas, pero tu no te dejas! ¡Me hartas enserio!-- ella miraba el piso con sus ojos con lagrimas.

--¡Deja de ser tan terca!-- Me acerque a ella, levante su mentón con mis dedos, obligando a que me mire. Se separo de mi y se acerco a la puerta abriéndola.

-- Tengo que pensar, vete de mi habitación.

--Esta es mi habitación-- arrugo su cara, se dirigió a mi cama y saco una manta -- ¡Que haces es mi manta hay frio hoy! 

--¡AHI TIENES EL VESTIDO, duerme con eso! me voy a la sala común-- cerro con un portazo, me jale el cabello, estoy tan frustrado, no se que hacer, se que necesita ayuda, pero que puedo hacer si ella no acepta mi ayuda, tengo que hablar con Hermione.

Narrador Omnisciente 

Mia fue a dormir a la sala común, molesta con la actitud del chico azabache, aunque ella muy en el fondo sabia que tenia que hacer algo, pero algo bien pensado y elaborado. No puede sola con Voldemort ni mas de diez mortífago.

Tampoco puede con dos de su familia: una hermana y una tía, quería pensar que ellas no tenían nada que ver con el innombrable, deseaba que eso fuera cierto. Pero si no lo era ¿Qué haría ella? 

Escucho pasos aproximarse a la sala común y enseguida se seco las vagas lagrimas que caían sobre su mejilla. Por la suavidad de sus pasos debía ser una chica, y tenia razón, Hermione estaba en el margen de la escalera. Mirandola con desprecio falso.

--¿Cómo se te ocurre abandonarme con Ron? no se que tomo hoy pero esta muy pesado, me abrazaba y me pedía perdón de rodillas estaba....-- la castaña vio las lagrimas de su mejor amiga y se sentó con ella, abrazándola.

--Harry ¿No? ese pelele es un bruto.

--No... no fue su culpa, esta vez fui yo la que metió la pata.-- Mia le contaba cada pequeño detalle de lo que paso en esos treinta minutos que estuvo con Harry.

--Tiene razón Herms, soy una idiota, soy terca, no acepto su ayuda pero es porque no quiero que tenga que cargar con el peso de mis problemas.

--Mhm, no eres idiota algo terca si, pero esta muy bien que pienses eso Mia, esta bien que te preocupes por Harry pero igual esta bien que el se preocupe por ti, el te ama mucho. 

--también tiene tíos malos, no quiero que tenga que sobrellevar otro.... Lily no quisiera eso. En fin Herms, tampoco quiero angustiarte con mis cosas.

--¡Ay dios! deja de decir eso, Mia no molestas ni angustias a nadie, nosotros te queremos mucho, te necesitamos mucho. Asique permítenos ayudarte, como tu nos ayudas siempre ¿Si?

La castaña comenzó a llorar, Hermione, la abrazo aun mas fuerte --Gracias Hermione.-- ambas chicas se quedaron abrazadas, dormidas hasta que amaneció. Al chocar el sol contra sus caras, ambas chicas se despertaron.