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Mia

Estaba nuevamente en la sala común, con mis padres y mi supuesto primo, a Harry lo deje en su habitación, insistió en bajar "Quiero acompañarte por favor" me decía con ojos de perrito, pero no cedi.

---Supongo que lo negó todo ¿No?--- dije en un suspiro acomodándome en mi asiento, acababan de llegar de enfrentar a Gabriela.

---Pues si, pero quiero que sepas hija que nosotros confiamos y creemos en tu palabra.---  dijo mi papa, acariciando mi hombro, mama estaba mirando con recelo a Cindy que ya estaba despierta, pero Draco seguía desmayado.

---¿Como pudiste....?--- dijo en un susurro quebrado, Cindy se levanto tratando de acercarse a Mama, pero ella retrocedió.

---Es tu hermana Cindy.... ¿En que estabas pensando?--- se acerco violentamente a ella, y le dio una cachetada, papa la agarro de sus brazos y la jalo hacia atrás.

---¡Ni en un millón de años pude imaginar eso de ti Cindy!--- le dijo alzando su voz, me puse delante de Cindy.

---Mama.... sabes que ella no tiene la culpa, sabes que fue....--- ella me empujo a un lado.

---Hablaremos seriamente de esto Cindy ¿Oíste?--- Cindy estaba llorando, bajo su mirada con vergüenza ---Mia, ve a dormir, mañana tienes clases, no quiero que te retrases ¿Si? descansa.

Se acerco a mi y me dio un beso en la frente, papa igual me dio un abrazo y me beso la cabeza, con una sonrisa, le di una sonrisa de boca cerrada a mi primo y me dirigí a mi cuarto, detrás de mi escuche murmullos de mi mama hacia Cindy.

Esta noche no me entere de nada, no sabia si mi tía había cedido de irse, o si había dado problemas, no sabia que pasaría con Cindy, no sabia nada. Suspire, estaba muy agotada, tenia sueño y me dolía algo la espalda.

Llegue a mi habitación y me recosté en mi cama boca abajo, no tenia ánimos ni de cambiarme de ropa, pasados unos diez minutos, un peso sobre mi me sobresalto.

---¿Harry?--- pregunte algo asustada, pero me relaje al sentir la punta de unos lentes en mi espalda.

---Si, ¿Qué paso? ¿Qué te dijeron?--- sabia que a eso había venido.

---Tu nunca te vas a cansar, nunca vas a entender que son mis problemas, tu tienes que descansar y prepararte para la ultima prueba.

El suspiro ---Y tu nunca vas a entender que tus problemas son los míos.--- suspire en derrota, no queria discutir el mismo tema con Harry. Asique lo deje ahi.

---Perdon amor, pero estoy cansada, no quiero hablar ahora.--- senti como se levanto y se sento en mis muslos.

---No te preocupes, descansa, yo te hare un masaje.

Me empezo a subir la camisa hasta mis hombros, me levante un poco para facilitar el masaje. Me acaricio desde la espalda baja hasta el broche de mi brasier. Senti un escalofrio al sentir sus manos calientes.

---Tienes el cuerpo frio bonita.--- dijo haciendo circulos con sus pulgares, solte un quejido mientras me acomodaba ---No hagas eso.--- dijo con firmeza.

Se acerco a el broche de mi brasier ---¿Puedo?--- pregunto con ese tono tierno que me derrite, me rei un poco y asenti, desabrocho mi brasier y me lo saco por un lado.

Siguio masajeando mi espalda, no podia contener los jadeos y los quejidos que soltaban mis labios , mi espalda estaba tensa y me dolia.

---Ay Merlin dame fuerzas.--- murmuro Harry, me movi un poco, el se detuvo, escuche como suspiro, vi por el rabillo del ojo que acercaba su cara lentamente a mi espalda, dejo un beso en esta, y empezo a pasar su lengua por mi espalda, finalizando con un beso.

Amor Dulce/ Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora