The dark lights

Capítulo Tres: La pérdida.

Apenas oí el buzón de voz llamé al 911 para que vayan a la casa de Duncan. Mientras tanto yo salí a fuera llorando, agarré mi bicicleta y tomé rumbo a lo de Duncan, mil cosas pasaban por mi cabeza, no podía pedalear más rápido porque sentía que mis piernas se iban a quebrar, hasta casi me choca un auto.

Llegué a la casa, tiré la bicicleta en su jardín y golpeé la puerta.

-¡Duncaaaaaaaaaaan!- Grité. ¡Ábreme la puerta por favor!

Nadie respondía, por lo que decidí ir a la casa de sus padres, que estaba atrás.

-¡MÓNICAAA! ¡SAMUEEEL!- Grité.

Ellos me abrieron la puerta y se los notaba raros, como si no hubiesen dormido ni un poco.

- Ey Yelena, ¿Qué sucede? - Preguntó Mónica.

-Necesito que abras la puerta de Duncan urgentemente, me llegó un mensaje de alguien diciendo que lo habían asesinado- Les dije llorando.

Ellos desesperadamente buscaron la llave y fuimos corriendo a la casa de enfrente.

Mientras íbamos, ví como un sombra se asomó por el pasillo que estaba entre la casa de Duncan y la casa del vecino. Se escuchaba la sirena policial cerca.

Mónica abrió la puerta, fuimos hasta la habitación, Samuel tocó la puerta y como no escuchó que Duncan responda, entró. La policía ya había llegado.

Cuando entré al cuarto ví la imagen mas fea que ví en mi vida, Duncan estaba tirado en el suelo, y tenía marca de dos manos inhumanas en su cuello.

Ya se lo estaban llevando y yo con los padres llorabamos desconsoladamente, nunca me había pasado algo así, era muy triste saber que mi mejor amigo ya no estaba más en esta tierra, en este mundo, en mi vida y en la de sus padres.

Llamé a mi tía y le conté la situación.

-Hola tía, falleció Duncan y mañana iré a su funeral- Le dije llorando.

-¡Uy! ¿Qué le pasó?- Preguntó.

-Pasado mañana cuando vengas, te cuento- Le dije. Adiós.

-¡Chau cariño!- Se despidió.

Yo me quedé en la casa de sus padres para pasar la noche con ellos y tratar de ayudarlos en lo que necesiten.

Al dia siguiente, asistí al funeral, estaba su familia y otros amigos de él. Lloré demasiado, estaba totalmente devastada.
En total duró 3 horas, al terminar me despedí de sus padres y me fuí a casa.

Apenas llegué me cambié, dejé el celular cargando ya que tenía poca batería y me puse a limpiar. Estaba escuchando música mientras limpiaba, cuando de repente la música se pausa, trataba de poner otra canción pero no había caso, la televisión estaba tildada, así que decidí desenchufarla. Luego la prendí y funcionaba de lo más bien, no se tildaba ni nada.

Pasó una hora y media, escuché un ruido proveniente de mi cuarto, así que fuí a ver que era. Cuando llegué no había nada, nada roto, nada fuera de lugar, tampoco signos de que alguien había estado en mi habitación.

Me acordé que el celular estaba cargando, fui a ver y ya tenía el 100%, lo desconecté y la luz se fue.