Emperador Kim | Taekook |

8

Capítulo 8

Y bien, cuando Jungkook salió de su habitación debido a que su estómago comenzó a rugir y exigir alimento, se dio cuenta de que todo estaba misteriosamente silencioso.

A pasos ligeros se encaminó a su sillón no notando al extraño alfa.

"¿Taehyung?" preguntó alzando la voz "¿Estás dormido o algo?" se asomó por la cocina, pero nada.

Tragó duro.

"Oye, no es gracioso esconderte ¿dónde estás?" entró al baño notándolo vacío.

Ahí es cuando Jeon empezó a irritarse tal vez un poco.

"¡Taehyung!" gritó esperando que lo escuchara, pero solo el silencio se notaba en aquella casa.

Caminó a la cocina para servirse un vaso con agua y cuando empezó a tomarla, observó un papelito en la mesa. Al momento de acercarse, notó una letra pulcramente legible y casi perfecta. Tomó la hoja y comenzó a leer:

Lamento no haberme despedido e irme desde ahora, pero ya no quería seguir incomodándote.

Buscaré ayuda preguntándole a las personas y veré la manera de regresar a mi palacio. Muchas gracias por lo que hiciste... Te volveré a ver y te pagaré por todo, te doy mi palabra.

Otra vez, gracias Jungkook.

Del emperador Kim Taehyung.

Jungkook leyó eso con una mueca en sus labios.

"La gente te va a tomar por loco si vas diciendo por ahí que eres el emperador" suspiró asentando el papel nuevamente en la mesa "Bueno, al menos ya no me va a interrumpir... eso es bueno" se dijo asimismo "Creo que cenaré... sí, por eso salí. Ceno y me duermo otra vez" 

No necesitó mucho tiempo para hacerse una taza de café comiendo alguna galleta que encontró en lo más profundo de su alacena.

"Supongo que se me fue mi apetito" se dijo al no querer comer algo más y solo tirarse en su cama y despertar al día siguiente que tenía clases.

Sentía una incomodidad, Jungkook no puede decir exactamente en dónde, sin embargo, ahí estaba.

Paseó un largo rato por toda la casa, de vez en cuando alzando rápidamente su mirada a los sonidos de la calle con la esperanza de ¿algo? 

"No le estés dando vueltas" abrió la puerta de su baño "Eres una gran persona Jungkook, incluso te preocupas de lo que pueda pasarle, pero ya no es tu responsabilidad... ugh, nunca lo fue de hecho" cepilló sus dientes y lavó su cara como siempre acostumbraba. Cuando salió del baño y de nueva cuenta fue a su habitación dispuesto a dormir miró de nuevo ese pedazo de cartón con la imagen del alfa, su teléfono también estaba en su mueble y el recuerdo de la noche anterior llegó a él.

Sin poder evitarlo, rió por la situación, sí, estaba algo molesto porque su celular estaba arruinado y no sabía verdaderamente si tenía alguna reparación o de plano tendría que comprar otro, pero debía admitir en lo más profundo de su ser, que la compañía de Taehyung le había agradado, tener a alguien con quien compartir el día le hizo bien.

"Espero y hayas regresado a casa a salvo" murmuró dando por finalizado su pensar.

Una vez más se aseguró de tener todas sus cosas para sus clases del día siguiente y como si esa tarde no hubiera dormido lo suficiente, cayó rendido otra vez.

[...]

"Aish" se quejó golpeándose el brazo cuando intentó matar a los moscos que le rodeaban "Tienen toda mi maldita habitación ¿por qué zumban en mi oído?" gruñó dando manotazos por el aire.

Se paró de la cama automáticamente caminando al baño para poder lavar su cara y orinar un poco. Cuando terminó, bostezó un par de veces fijándose que la luz del día alumbraba por las ventanas.

Sus brazos le picaban un poco y fijándose bien, tenía algunas ronchas debido a los moscos intrusos que rondaban por su habitación.

La hora que vio daban casi las doce de la tarde, su cara cansada demostró su molestia, pues la universidad empezaba a las dos en punto.

"Genial, ahora iré a clases con picazón y los brazos rojos" sonrió falsamente husmeando en su cocina para ver qué podía comer.

Y omitiendo todos los detalles, en resumidas cuentas, Jungkook comió un poco de pan tostado, se arregló lo más decente que podía y finalmente, salió de su casa para caminar unos quince minutos en lo que llegaba a su escuela.

El barrio donde vivía era uno tranquilo, las personas comenzaban su día muchísimo antes que él, por lo que en su caminata lograba ver algunos puestos que ya habían abierto, saludando cordialmente a las personas que le hablaban y de igual forma, varios estudiantes se acompañaban para llegar al mismo punto.

"Buen día, demos comienzo a la clase con el tema que dejamos para estudiar este fin de semana"

Clase tras clase transcurrió... Jeon era un buen alumno, siempre tratando de estudiar lo que dejaban y aunque no era el típico aplicado, tenía buenas notas, sin embargo, ese día no prestó demasiada atención. Algunos maestros le reprendieron cuando le preguntaban algo y no hacía el intento de contestar, cuando los compañeros con los que comía le preguntaron si iría él simplemente se negó, y al momento de tomar apuntes, su cuaderno estaba en blanco.

Ese fue un golpe bajo para el omega, pues sabía la razón de por qué no estaba en sí.

Y era ese tonto pedazo de cartón que no se fue de sus manos todo ese día. Observando detenidamente las letras y la imagen que estaba sobre este.

Kim Taehyung, Kim Taehyung.

"Hey, Jungkook, te acompaño a la salida. La clase terminó" le comentó la persona que se sentaba a lado de él.

"Uh, no gracias, tengo que pasar a un lugar y me iré por otro lado" le sonrió levemente y tomando sus cosas, salió del salón que se encontraba ya casi vacío.

Mejilim.