Break up with your boyfriend - Intenabo

chapter twelve

"you jealous, princess?"

Por una fracción de segundo, solo un segundo, Gustabo considera reservarlo.

Mira el arco de entrada de la cocina y contempla correr hacia él antes de que Horacio pueda siquiera pensar en abrirse camino.

Pero luego realmente lo piensa y se da cuenta de que ese podría no ser el mejor curso de acción porque, en todo caso, eso lo hace parecer culpable. Y a pesar de que era culpable, Horacio no lo sabe. Por lo que Horacio piensa, Gustabo está aquí con un amigo. Así que no hay necesidad de despertar sospechas sobre sí mismo. Correr tan pronto como llame su nombre sería un delato hacia la muerte inmediato.

Maldiciéndose mentalmente a sí mismo, mira hacia atrás en la dirección donde había visto a Horacio por primera vez y descubre que el chico de dieciséis años ya se está acercando a donde se ha arrastrado en una esquina entre la ventana y el lavabo. Con una última advertencia para sí mismo acerca de jugar con calma, Gustabo fuerza su expresión a algo entre indiferente y causal.

—Bueno, bueno, mira esto, nunca pensé que vería el día en que irías a una fiesta de fraternidad sin que yo arrastrara tu culo ahí. — Horacio comenta divertido una vez que está lo suficientemente cerca para que el otro lo escuche. Gustabo solo le lanza una pequeña sonrisa, —Hola a ti también, Horacio. — Él shoots de vuelta, guardando sutilmente su teléfono.

—Entonces, ¿dónde está el tío venenoso? — El chico de cresta tararea, mirando alrededor del pequeño grupo de personas que se mezclan en la cocina, como si estuviera buscando a alguien específico.

—¿Quién? — Gustabo pregunta, levantando una ceja ante el nuevo apodo, aunque cree que tiene una idea bastante decente de quién está hablando.

Horacio pone los ojos en blanco ante esto, —Tu novio, bobo, ¿dónde está? Sé que no viniste aquí por tu cuenta. — Él señala y Gustabo se lo cuenta, eso es cierto. Las fiestas simplemente no eran su escena y normalmente eran algo a lo que no iría solo. Pero él no es un completo mojigato, definitivamente sabe cómo pasar un buen rato y lucirse después de un par de tragos.

—En realidad no vine aquí con Viktor, vine con un amigo. — Técnicamente no es una mentira porque, después de todo, Jack es un amigo, un amigo con derechos. De acuerdo, tal vez amigos es un poco exagerado, pero está en el nombre, así que eso es con lo que se está convenciendo.

Horacio parece estar sorprendido por esto, ya que levanta las cejas hasta que casi quedan ocultas detrás de sus cresta la cual estaba alaciada, parpadea por un momento antes de soltar una carcajada. —Perro, por favor, no tienes amigos fuera de Segis y yo. — Afirma con diversión centelleando en sus ojos marrones. Gustabo no puede luchar contra el sonrojo que surge de las palabras de Horacio, porque son ciertas después de todo. No es que no fuera agradable persona, tenía toneladas de colegas, muchas gracias, era difícil manejar las amistades con el horario que llevaba.

Horacio y Segis parecían ser las únicas dos personas que entendían eso.

—Vete a la mierda, no lo sabes. — responde casi a la defensiva. Horacio solo le sonríe a sabiendas.

—Oh, ¿en serio? Entonces, ¿dónde está tu amigo, hm? — Su tono parece burlón y Gustabo puede decir que no le cree.